Después de dos temporadas reinando en la Bundesliga, el año pasado le llegó al Borussia Dortmund el momento de pegar un golpe sobre la mesa en competición europea, alcanzando la final de la Copa de Europa. La esencia de ese equipo que sorprendió a Europa continúa viva en el Borussia Dortmund actual, pero no es tan poderoso como el del pasado curso. El conjunto alemán ha estado muy lastrado por lesiones durante toda la temporada, perdiendo a hombres clave, lo que le ha condenado a tener que hacer un sobresfuerzo para mantenerse con vida en varias competiciones. Para el Real Madrid será un rival más asequible que la pasada temporada, pero no pondrá las cosas fáciles ni mucho menos.

Grado de dificultad: 7

Lewandowski, protagonista

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Robert Lewandowski es el protagonista indiscutible de la eliminatoria. La pasada temporada fue el verdugo del Real Madrid, marcando cuatro goles en el partido de ida. Sin embargo, esta vez no podrá jugar el primer encuentro por sanción. Eso supone una ventaja para el conjunto blanco, que se evitará enfrentarse a su bestia negra en uno de los dos partidos. Este verano abandonará al club para unirse a la causa del Bayern de Munich, pero está comprometido con el Borussia Dortmund, como demuestran sus números. En esta edición de la Liga de Campeones ha marcado seis goles y quiere ampliar la cuenta contra el Real Madrid, aunque tendrá que dejar los deberes para el partido de vuelta.

Lastrado por las lesiones

El Borussia Dortmund se ha visto muy afectado por las lesiones durante toda la temporada. Ha perdido jugadores muy importantes a lo largo del curso, lo que ha obligado a Klopp a hacer encaje de bolillos en más de una ocasión para completar la alineación. La defensa ha sido la línea que más perjudicada se ha visto por la plaga de lesiones, aunque contra el Real Madrid ya estarán recuperados casi todos los efectivos para completar la zaga. Se perderán los dos partidos de la eliminatoria contra el Real Madrid jugadores tan importantes como el defensa Subotic, el organizador Gundogan, el siempre útil Bender, y la verticalidad de Kuba. Sin ellos cuatro, el Borussia Dortmund pierde mucho potencial.

Estilo marcado

Más allá de los títulos, de haber destronado al Bayern de Munich como equipo dominante de la Bundesliga durante dos temporadas, o alcanzado la final de la Copa de Europa, el mayor triunfo de Jurgen Klopp es haber dotado al Borussia Dortmund de una personalidad propia y un estilo de juego identificativo en el que cree con una fe ciega. El conjunto alemán apuesta por un fútbol de toque y no cambia su guión pese a que la situación esa complicada. Atacan con descaro y defienden asumiendo riesgos a sus espaldas. Son un equipo muy difícil de maniatar. Ese estilo se ha perpetuado durante los últimos años y no varía pese a la renovación que ha sufrido la plantilla temporada tras temporada por la fuga de jugadores clave. Se marcharon Kagawa o Gotze, pero el estilo permanece.

Caras nuevas

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Una de las claves para mantener el nivel pese a la fuga constante de jugadores es acertar con los refuerzos y eso es lo que ha hecho Jurgen Klopp. El técnico alemán ha sabido encontrar los mejores recambios para suplir las ventas de futbolistas clave. Este verano han llegado al Signal Iduna Park Sokratis, Mkhitaryan y Aubameyang y su rendimiento ha sido positivo. El defensa Sokratis ha ganado importancia tras la lesión de Subotic, mientras que Aubameyang se ha convertido en un jugador importante para las segundas partes por su verticalidad y velocidad. Klopp utiliza al gabonés como revulsivo o arma para hacer daño a la contra. Pero, sin duda, el fichaje que mejor ha encajado es el de Mkhitaryan. El armenio está funcionando perfectamente y mueve los hilos del Borussia Dortmund.

ONCE TIPO:

LA PREGUNTA: ¿QUÉ OPCIONES TIENE EL REAL MADRID CONTRA EL BORUSSIA?