Navidad, valores, ganar o perder
Se termina el año y siempre es bueno recordar valores que hay que resaltar. Superar el ganar o perder. Mejorar como personas.


Estamos en vísperas de navidad y me resulta fructífero ahondar en los detalles. Cuando se habla de que el fútbol convencional es construido como un escenario altamente competitivo, es donde la necesidad está asociada al ganar. Partiendo de este punto, es importante profundizar en lo que plantea Alabarces cuando expresa que la palabra “ganar”, se encuentra condicionada por la cultura del “aguante”, donde las conductas y las formas de accionar buscan legitimar la rivalidad, la disputa contra un contrario.
Desestimar la posibilidad de la derrota, es un punto importante a tener en cuenta, donde el “aguante” es una forma típica del honor, donde salir victorioso, lograr un resultado positivo, es un acto honorable, mientras que perder, es un hecho deshonroso. De este modo, ante el ideario de no llegar a la instancia humillante que provoca la derrota, se producen actos relacionados al “vale todo”, para lograr alcanzar el resultado.
La burla dentro de la cultura del “aguante” sirve para establecer dominación sobre el contrincante, para subordinar al rival a través de la humillación, haciendo alusión a sus propias “falencias”. “Falencias”, que dentro de la cultura del “aguante”, están ligadas a la deshonra que provoca estar perdiendo. La idea de modificar esta apreciación, donde el verdadero hombre de honor está ligado a aquellos que alcanzan el reconocimiento y el prestigio de la victoria, y lo deshonroso está relacionado a la derrota, es sumamente importante.
Podemos concluir, que es necesario repensar esta ambigüedad, esta relación antagónica entre el ganar o perder como ideal de honor que se reproduce. De esta manera, aquellas personas condicionadas a partir de ese ideal, que reflexionan sobre esta ambigüedad, se transforman, dejando de relacionar el honor a un resultado numérico y si a los que reproducen y transmiten valores.
Un mensaje a tener en cuenta, para estas navidades, donde debemos volver a los detalles para asimilar valores.