Por esto el Eibar - Celtic no es sólo un partido de fútbol
Armeros y escoceses disputan un encuentro amistoso con mucha más historia en la trastienda del partido que sobre el césped
Eibar y Celtic de Glasgow se enfrentaron ayer en un amistoso con motivo del 75º aniversario del conjunto armero, un cumpleaños muy especial que el club espera celebrar durante todo el curso en Primera División. Lejos de llamar a clubes de primer nivel como podría ser el Bayern de Múnich, el PSG o cualquier otro equipo que suele acudir a la celebración de aniversarios en números redondos de cualquier club con fin de hacer caja, el Eibar decidió llamar al algo más modesto Celtic de Glasgow, ¿por qué? Pues porque entre ambos clubes existe un simbolismo sin igual.
El de ayer fue el tercer encuentro internacional que acogió el campo de Ipurúa. El primero fue contra el Girondins de Burdeos francés en la celebración del 25 aniversario azulgrana; mientras que el Ajax de Amsterdam holandés fue el invitado cuando el Eibar cumplió 50 años en 1990. Ahora ha sido el turno del Celtic de Glasgow y es que cada vez más dirigentes se dan cuenta que es un error tratar al fútbol como un negocio, en especial en clubes pequeños que no soportan el denostado 'fútbol moderno', algo que bien han entendido en Vallecas. Es por esto que los escoceses han sido los elegidos y basta con mirar a uno de los fondos de Ipuría para conocer la razón.
Eskozia La Brava es el nombre que recibe la principal peña del Eibar y es en sus orígenes donde encontramos este vínculo escocés. Antes de que el grupo se formara en 2001, aquellos que lo fundaron ya animaban al conjunto armero durante las décadas de los 80 y los 90, y solían quedar para disfrutar del torneo VI Naciones de rugby, en el que quedaron prendados de la forma de animar, llenar las gradas y el ambiente en general que brindaban los escoceses. Fue por esto que tras numerosos años animando como peña no oficial decidieron dar el paso con el nombre "Scotland The Brave", pero pasado al Euskera "Eskozia La Brava".
No es extraño presenciar banderas de Escocia en las gradas de Ipurúa y mucho menos extraño ayer, con cerca de 500 aficionados desplazados desde Glasgow para ver a su equipo junto a una afición a la que ya pueden considerar hermana. En un segundo plano quedó la victoria escocesa por un contundente 1-4 y así lo demuestran las numerosas fotografías que han inundado las redes sociales con aficionados de ambos equipos yéndose de fiesta antes y después del encuentro por la ciudad vasca. Y es que, al fin y al cabo, eso es el fútbol.
Ernesto González
Ha trabajado como redactor en FutbolPrimera.es y Fichajes.net. Miembro numerario de CIHEFE.
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