Argentina: Arranca el campeonato más curioso

La liga en Argentina arranca de nuevo estrenando un nuevo y curioso formato. Lo analizamos para que lo conozcas antes de que el balón comience a rodar

No hay letrero sin pintar, pasión sin verbalizar ni color por amar. La extensión de la palabra hincha, forofo, aficionado a la pelota en todo el planeta… toma su mayor fuerza en el fútbol argentino, que históricamente no solo exporta el considerado mayor Clásico del fútbol mundial (River-Boca), sino que amplió a ciudades como Rosario (Newells-Rosario Central) o a barrios como Avellaneda (Independiente-Racing), toda su desestructurada y desorbitada exacerbación hacia los clubes. Esas mismas sensaciones alocadas, excesivamente dinámicas y lamentablemente alejadas de la lógica constructiva, llevaron al ya fallecido ex presidente Julio Grondona a la idea de reorganizar el patrón del fútbol argentino. Los ya históricos torneos cortos que también son constantes en el resto de Sudamérica, iban a pasar a mejor vida (unos aplauden y otros critican, como todo acá) para los argentinos, que contarían con un torneo único, mucho más ampliado en el calendario y, sobre todo, con aroma nacional, pues la idea era aumentar a 30 los clubes participantes para que toda Argentina tuviera su representante.

Grondona tramó toda esta nueva estructura en torno a una idea, la de mejorar la economía de su fútbol gracias a las apuestas. Todo consistía en financiar a los clubes con el aluvión de dinero que llovería de las empresas ‘ociosas’ que ya había acercado posturas. Tanto, que hasta llegaron a bautizarlo: Prode Bancado por Pronósticos Deportivos. Sin embargo, el fracaso llegó poco después, cuando las empresas interesadas cedieron en su empeño y, aunque no hay explicaciones al efecto ni con la muerte de Don Julio el pasado verano, la herencia era inevitable. Todo, porque apareció un enemigo inesperado pero temible. Uno de los que todo lo ve, todo lo toca y todo lo opina. Uno de los que tiene una fuerza tan poderosa como el fútbol para muchos argentinos y que, si levanta la voz, pocos son capaces de contradecirle: la Iglesia Católica.

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"Cada partido quedará sospechado de un arreglo por millones de pesos. Hay experiencia internacional acerca de que las apuestas de fútbol online estimulan el fraude deportivo", dijo el obispo Jorge Lozano. “Si se sigue adelante, favorecerá el blanqueo de dinero proveniente del delito y la corrupción, además de promover la ludopatía", amplió semanas más tarde. Cuando casi todo estaba organizado y los preparativos del torneo superaron a la realidad comercial que no se conocía en su versión más realista (por intereses evidentemente internos de las propias empresas implicadas), el freno al acuerdo limitó la capacidad de reacción desde el fútbol nacional. Primero fue Santa Mónica quien renunció al plan y, después, el magnate Cristóbal López, que domina el juego del país con el Casino Club, un hipódromo y tragamonedas, se sumó el rechazo. Y así, todo siguió adelante con una idea ‘experimental’ que solo se desarrollará este curso.

Este viernes arranca por tanto el torneo más extraño de las últimas décadas. Sin descensos en Primera, el torneo de Segunda en 2014 fue un éxito con diez ascensos en juego. Los equipos invirtieron dinero en carretilla para reforzarse y poder estar presentes en esta edición. Si se multiplicó el interés de clubes menores que, por vez primera, soñaban con llevar sus colores al primer nivel argentino. Y es que, ante tal despropósito, pocos habrían podido dar marcha atrás con lo sucedido. Vamos, que nadie tuvo la osadía de mandarlos de nuevo a Segunda porque se ganaron en la cancha su derecho a estar entre los gigantes. "Fue un exabrupto subir diez equipos y más grande hubiese sido descender a diez", dijo Armando Pérez, presidente de Belgrano de Córdoba. ¿Cómo lo arreglará la AFA para el futuro? Pues programó para los próximos años torneos en los que será mayor la cantidad de descensos que la de ascensos para equilibrar en unos años.

La ‘Cara B’, es que ahora, con 30 participantes, los largos viajes y las plantillas más amplias de lo normal, los gastos se multiplican seriamente en las ya endeudadas arcas de los clubes argentinos. Y es que ya nadie oculta que todos ellos viven por los millonarios subsidios del gobierno (que emite muchos partidos gratis en Tv). "Cuando nos explicó Grondona que era más televisable, más atractivo, nos convenció. Ahora hay que normalizar (reducir equipos) lo antes posible este torneo", dijo el presidente de San Lorenzo, Matías Lammens.

Eso sí, no es la primera vez que el fútbol argentino se enfrenta a un torneo de 30 o más equipos en Primera División. Entre 1967 y 1985 se creó un Campeonato Nacional, pero se disputaba por zonas y no duraba más de cuatro meses, algo que no es vinculante al torneo que va a iniciarse este fin de semana. Y todo, porque Grondona aspiraba a un gran torneo federal donde estuvieran representados los 24 distritos del país con algún equipo. Pero hoy, la realidad es que Buenos Aires sigue siendo hegemónica y sólo habrá un ‘novato’, el singular Crucero del Norte de Misiones. Disfruten, que la pasión será capaz de hacer olvidar cualquier desagravio histórico… una vez más.

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