Los equipos más leñeros del fútbol español
Análisis estadístico completo repasando los equipos que más faltas han cometido hasta ahora en la temporada 2014 - 2015 de la Liga BBVA
El Sevilla de Unai Emery es el equipo al que más faltas le han señalado en el campeonato de liga, una estadística en la que el Barcelona ocupa el último lugar de la lista ¿hasta qué punto estos datos tienen relación con el nivel de agresividad de un equipo? Intentamos encontrar respuesta y analizamos a los clubes y jugadores más castigados por los árbitros.
Sevilla y Espanyol son los equipos que más faltas han cometido en lo que llevamos de liga. Los hispalenses han sido históricamente un club en el punto de mira de los colegiados por su juego duro y aguerrido, pero siendo honestos, no parece que el dato de faltas 2014-15 esté ligado a la excesiva agresividad de los jugadores actuales. Resulta curioso descifrar que si bien Sevilla y Espanyol son los equipos más castigados en el apartado de faltas, no lo han sido tanto en el terreno de las tarjetas, donde los blanquiazules son el 8º conjunto más tarjeteado y el Sevilla nada menos que el 14º (es decir son uno de los conjuntos más limpios en la clasificación de tarjetas). A continuación podemos observar la tabla completa de la liga ordenada por el número de faltas que los árbitros señalaron.
El liderato del Sevilla en faltas contrasta con el número de tarjetas recibidas que hemos citado antes, pero en la clasificación podría resultar más curioso todavía que sean precisamente Barcelona y Real Madrid los clubes a los que menos faltas les han señalado. A buen seguro que más de un aficionado pensará que a los colegiados se les silencia el silbato cuando deben pitar acciones en contra de los poderosos, pero existiendo siempre una pequeña influencia de este punto, hay razones de peso que explican estos datos de forma más razonable. Los dos grandes de la liga son los equipos que más goles marcan, por tanto atacan con mayor frecuencia que defienden. También son los dos que más posesión de balón tienen (en el caso del Barça casi un 70% de media en el campeonato y en el del Real Madrid un 57%), y por tanto poseen menos tiempo de juego real para hacer faltas que el que tienen para recibirlas. Todas estas razones explican la diferencia sustancial que existe entre las faltas que les señalaron a ellos (Barça 129 y Real Madrid 136) y las que recibió el tercer equipo con menos sanciones de la lista, el Almería (175).
En el caso del Sevilla, la primera lectura que debemos obtener es que Unai Emery ha sabido hacer de la falta táctica un arma de gran potencial para su equipo. Aunque los sevillistas han sufrido algún tropiezo en campos importantes, su estrategia ha sido bastante efectiva hasta el momento. Pocos afirmarían que el equipo de Unai Emery es un conjunto agresivo a tenor de su puesta en escena y propuesta, pero lo cierto es que hace de la interrupción del juego rival uno de sus grandes escudos de contención; las faltas a favor le permiten reorganizarse en fase defensiva. No es casualidad que uno de sus grandes puntales este año, el polaco Grzegorz Krychowiak, sea el futbolista del campeonato que más faltas ha cometido (al menos estadísticamente es el que los árbitros han castigado más). Pero de forma sorprendente, el polivalente centrocampista sevillista también ha sido el jugador más importante en la elaboración, ya que es el futbolista del Sevilla que más pases ha realizado. Queda claro que los datos del Sevilla 2014-15 caminan en medio de una paradójica e inexplicable dualidad.
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Para entender lo curioso de esta relación de parámetros basta un ejemplo: en el Real Madrid el futbolista que más pases da es Toni Kroos, y el que más faltas le pitan Ramos. En el Barça Busquets es el líder de pases y Dani Alves el más damnificado en faltas. Como vemos, en los dos casos hablamos de resultados previsibles según la zona del campo en la que juegan y el rol que adoptan. El hecho de que Krychowiak lidere las dos parcelas en su equipo explica el valor que tiene el polaco en el Sevilla, y de nuevo da la razón a quienes apoyan el hecho de que Emery explota más que nadie y de forma premeditada las faltas en el centro del campo.