Kagawa contra la maldición del futbolista japonés
Repasamos la historia y los logros de todos futbolistas nipones que han jugado en la máxima categoría del fútbol español.
Esta semana conocíamos la noticia de que el Valencia renunciaba al fichaje de Enzo Pérez y se interesaba con Shinji Kagawa. El mediapunta se convertiría en el octavo futbolista nipón que pisa el césped en la Primera División española. ¿Qué suerte corrieron sus compatriotas?
El pionero en llegar desde el país del Sol Naciente fue Nobuyuki Zaizen, que desembarcó en el Logroñés en la temporada 1996/97, convirtiéndose así en uno de los dos primeros futbolistas japoneses en jugar al fútbol profesionalmente en España junto a Sotaro Yasunaga, quien firmó por la UE Lleida de Segunda División. El joven Zaizen no tuvo suerte en su periplo riojano, siendo su historia en el deporte rey español corta y triste; la ley de la época limitaba el cupo de futbolistas extracomunitarios en los clubes y el técnico, Miguel Ángel Lotina, decidió no hacerle ficha y alinearlo tan sólo en encuentros amistosos. Finalmente, en el mercado invernal de esa misma temporada, regresaría al Verdy Kawasaki de donde fue fichado.
La mala experiencia de Zaizen no echó para atrás a otro futbolista nacido en la isla de Hokkaido, Shöji Jö, que en enero del año 2000 llegó al Real Valladolid convirtiéndose así en el segundo jugador nipón de la liga española y en el primero de esa nacionalidad en disputar un encuentro oficial. Los vallisoletanos desembolsaron 400 millones de las antiguas pesetas (2'4 millones de euros) por hacerse con la cesión del 'nuevo Nakata' y expandir la imagen del club en las islas asiáticas.
Shöji apuntó alto en su llegada al Nuevo Zorrilla prometiendo "un gol por partido", una cifra que se le antojó lejana puesto que sólo consiguió 2 tantos (ambos al Real Oviedo) en los 15 encuentros que disputó. Pero la mala suerte volvió a cebarse con un futbolista japonés en tierras españolas. Tras los dos goles decisivos ante los asturianos y un soberbio partido que dio la victoria al Valladolid en el Santiago Bernabéu, Shöji Jö se lesionaba del ligamento cruzado anterior de su pierna izquierda durante un China - Japón, lo que le dejó fuera de los terrenos de juego siete meses tras lo que el club pucelano decidió no ejercer su derecho de compra.
[video:https://www.youtube.com/watch?v=HQQp2xJuvoA]
La temporada siguiente fue el RCD Espanyol quien se animó a 'poner un japonés en su vida'. Akinori Nishizawa llegaba a la Primera División en el mercado invernal de la 2000/01, debutando el 14 de enero en un encuentro que los pericos perdieron ante la UD Las Palmas. Su periplo fue de 6 partidos en los que no logró superar al guardameta rival, pero esto no le privó de gozar de su minuto de gloria. En los cuartos de final de la Copa del Rey el Espanyol llegaba al Camp Nou teniendo que remontar un 2-1 en contra. El electrónico mostraba 1-1 y Nishizawa lograba superar a Pepe Reina forzando así la prórroga sobre la bocina, pero el colegiado Pérez Borrull anuló el tanto por fuera de juego privando a Akinori de ser el héroe del encuentro, aunque no evitó que miles de pericos se emocionasen con su 'gol' y dejarnos una estampa para la posteridad.
Finalmente, en un equipo con una tremenda competencia goleadora como son Raúl Tamudo, Aganzo, Benítez, Palencia y Pacheco, y con poco que ofrecer tras lo demostrado en su primer año, Nishizawa se marchó cedido al Cerezo Osaka, donde volvería a enderezar el rumbo de su carrera.
De ese mismo equipo llegó nuestro siguiente protagonista. En enero de 2005 el RCD Mallorca fichaba a Yoshito Okubo, que debutaría ante el Deportivo de La Coruña saliendo en el once titular pese a que sólo llevaba un par de semanas en el conjunto bermellón, algo debió ver Héctor Cúper en el jugador nipón ya que en su debut se estrenó con una asistencia y anotando el gol decisivo del empate final. Finalmente, Okubo cuajó una buena segunda vuelta marcando tres tantos en 13 encuentros, logrando así la agónica permanencia del club balear, lo que le valió para ampliar su cesión por una campaña más.
Tras un inicio convulso en el que Gregorio Manzano sustituyó a Cúper en el banquillo de Son Moix, el Mallorca terminaba la 2005/06 en 13ª posición, con un Okubo que volvió a anotar 3 goles pero esta vez en 27 partidos. Esta cifra no convenció a los dirigentes baleares que no efectuaron la opción de compra que tenían sobre el nipón, quien volvió al Cerezo Osaka.
[video:https://www.youtube.com/watch?v=hc0Q-Oi96cc]
En 2009 y tras la Nishizawa Experience, el Espanyol se animó a contratar a Shunsuke Nakamura, un futbolista que, a diferencia de los anteriores, ya contaba con una dilatada experiencia en el fútbol europeo tras tres temporadas en la Reggina y cuatro en el Celtic de Glasgow. El futbolista era el refuerzo mediático de los pericos (más de 7000 aficionados acudieron a su presentación, espontáneo incluído) llegaba para aportar calidad y abrir los mercados del club albiazul, pero sólo pudo lograr lo segundo.
Cero goles en doce encuentros fue el pobre bagaje que dejó en Cornellà-El Prat el que fuera primer goleador japonés en la Champions League, que fue de más a menos y Pochettino terminó relegando al banquillo. La marcha de su mujer e hijos a vivir a Japón sumados a los problemas de adaptación fueron un duro hándicap para el jugador nipón, que volvió al Yokohama Marinos donde se formó en sus primeros años de futbolista.
[video:https://www.youtube.com/watch?v=jtm2GrRckHc]
Y llegamos ya a Akihiro Ienaga, el último samurai que se aventuró en tierras españolas hasta la llegada de Havenaar. Como la gran mayoría de sus compatriotas, Akihiro llegó en el mercado de invierno de la temporada 2010/11 al RCD Mallorca, como en su día hizo Yoshito Okubo. Un contrato de cinco años con una cláusula de rescisión de 18 millones de euros eran la muestra de las esperanzas que la directiva bermellona había depositado en 'Aki', nombre que luciría en la camiseta. Pero no sólo se ganó a los dirigentes, también el técnico Michael Laudrup le hizo hueco en una plantilla con las tres plazas de extracomunitarios ocupadas, dando de baja al brasileño Ratinho.
Ienaga debutó a principios de febrero ante el Osasuna en la posición de mediapunta, pero no sería hasta abril cuando se estrenaría en Liga con un potente cabezazo que batió a Javi Varas, cancerbero del Sevilla. De la misma factura fue su segundo y último gol en tierras españolas durante los 25 encuentros que disputó entre 2011 y 2013 antes de marcharse cedido al Ulsan Hyunday surcoreano. El último en llegar ha sido Mike Havenaar, quien ha fichado por el Córdoba este verano.
[video:https://www.youtube.com/watch?v=tSRyAhk84Vc]
No es demasiado exitosa la carrera de los japoneses en la liga española, veremos si la historia cambia con el octavo samurai Shinji Kagawa, que, de cerrarse la operación, llevaría el peso atacante en el Valencia, donde cobrará más que los dos puñados de arroz por los que trabajaban en la película de Akira Kurosawa.