Holanda se convierte en el primer país que utiliza a todos sus jugadores en un Mundial

El partido por el tercer puesto, esa final que nadie quiere jugar, era la única forma de Holanda y Brasil de redimirse ante sus aficionados. Los primeros por tocar con la punta de los dedos la final y los segundos para disculparse tras la bochornosa derrota a Alemania, por lo que no se esperaba un partido sencillo.

Y así fue. Ambos seleccionadores salieron con un once inicial repleto de titulares con el objetivo de lograr ese tercer puesto, algo que sólo cumplieron los holandeses que encarrilaron el encuentro desde los primeros minutos.

Tras el tercer y definitivo tanto de la Naranja Mecánica nacido en las botas de Wijnaldum, Van Gaal decidió dar entrada al único jugador que todavía no había disputado ni un sólo minuto en el Mundial: Vorm, el tercer portero de la selección, que entró en lugar de Cillessen (quien ostenta el dudoso honor de ser el primer portero sustituido dos veces en un Mundial).

El segundo portero de los Tulipanes, Tim Krul, ya disfrutó de minutos durante la tanda de penaltis ante Costa Rica en cuartos de final, donde se destapó como un auténtico héroe nacional al atajar dos disparos. Sólo quedaba Vorm y, tras entrar en el campo, Holanda se convierte en la primera selección en toda la historia que utiliza a los 23 jugadores convocados.