Ancelotti y otros entrenadores italianos en España

Carlo Ancelotti se sentará en el banquillo del Real Madrid durante la temporada 2013-14, su llegada supondrá la séptima presencia de un entrenador italiano en la primera división española. Repasamos a los técnicos transalpinos que le precedieron en La Liga.

El fútbol italiano y el español han caminado de forma paralela desde siempre. El último capítulo de esta historia se vivió en la noche de ayer, cuando sus respectivas selecciones protagonizaron una hermosa batalla futbolística llevada hasta el extremo y resuelta desde el fatídico punto de penalti. Han pasado casi 93 años desde que en 1920 jugaron por primera vez, y en medio de todo este tiempo transcurrieron demasiados hechos que marcaron la trayectoria de su fútbol; los Juegos de 1924 y 1928, el mundial de 1934, las Eurocopas de 1980 y 1988, el codazo de Tassotti, el penalti de Fábregas...y ayer el lanzamiento a las nubes de Bonucci.

Si algo ha caracterizado al fútbol español y al italiano ha sido el respeto mutuo; rivalidad deportiva entre clubes y los equipos nacionales, pero una constante admiración por los hombres importantes de este espectáculo, los futbolistas y entrenadores. A pesar de que la forma de entender el juego y el estilo han sido siempre muy diferentes en los dos países, en España se teme a la azzurra y sus equipos con el mismo grado que los conjuntos de la Serie A no desean verse las caras con nada que huela a fútbol español.

Tal vez por todo lo expuesto anteriormente, los técnicos tuvieron bastante temor a dar el salto entre los dos países. Luis Miró abrió en los años sesenta un camino que no ha sido seguido por demasiados entrenadores españoles, y parece que Rafa Benítez es el único que desea ser recordado y cambiar la historia a pesar de su estrepitoso fracaso anterior en el Inter. Pero, ¿cómo les fue a los italianos en España? ¿qué aportaron? ¿en qué fallaron? Intentamos encontrar la respuesta en las siguientes líneas y de paso, este pequeño análisis sobre los técnicos italiano en España nos permitirá comparar dentro de unos meses la labor de Carlo Ancelotti al frente del Real Madrid con el recorrido efectuado por sus compatriotas.

FABIO CAPELLO

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Uno de los técnicos con más talento y dueño de una de las galerías de trofeos más brillantes de la historia del fútbol. Controvertido en sus métodos pero muy firme en sus convicciones, Fabio vivió en Madrid las dos caras de la moneda del deporte. Por un lado la buena, ya que su breve paso dividido en dos etapas estuvo cargado de éxito, y por otro la presión generada por un club de la grandeza del Real Madrid, donde ni siquiera los éxitos garantizan la estabilidad.

Capello aterrizó en Madrid en 1996, tras una temporada lamentable para los blancos en la que no pudieron clasificarse para competiciones europeas. Lorenzo Sanz, el presidente en ese momento del Real Madrid, entendió a la perfección lo que demandaba la entidad: agotar el talonario y reforzar al equipo con los mejores jugadores del mercado, y es que menos Ronaldo, el Real Madrid se lo llevó casi todo, y además consiguió firmar grandes futbolistas a un precio razonable. Porque si bien es cierto que gastó una gran cantidad de millones de pesetas en el fichaje de Mijatovic, otros traspasos como los que llevaron a Seedorf o Roberto Carlos a Madrid no fueron especialmente costosos. Con esos mimbres sólo faltaba un jefe que pudiera dirigir el vestuario, y el elegido no fue otro que el exitoso técnico del Milan Fabio Capello.

Ya en pretemporada quedó de manifiesto su estilo. Iba a ser muy duro con sus futbolistas, y por culpa de ello surgirían las primeras fricciones. El Real Madrid fue el mejor equipo del campeonato, pero en un solo año Capello terminó cansado del entorno del club. Se marchó con la liga y volvería años después con un guión de la película calcado. Circunstancias parecidas, más arrugas y otro título de liga en el zurrón. Capello es el gran precedente para Ancelotti.

Lo mejor:

Fue pionero en su época y abrió las puertas del fútbol español a varios técnicos de su país. El Real Madrid siempre mostró un fútbol muy sólido en el que se recuperaron valores como las remontadas de la segunda etapa; jugar en el Bernabeu con Capello en el banquillo fue un problema para todos sus rivales.

Lo peor:

Nunca terminó de adaptarse y tampoco tuvo una relación fluida con la prensa. En la primera época vivió momentos de tensión con las estrellas y en la segunda llegó incluso a excluir a David Beckham, que curiosamente mostró tras esta decisión su mejor nivel al ser readmitido en el equipo de nuevo.

La anécdota:

Si algo aprendió don Fabio en España fue el poder de la gastronomía española. Se declaró fan absoluto del jamón de bellota y fue durante su estancia en la capital un habitual de los grandes restaurantes de la ciudad.

CLAUDIO RANIERI

Llegó a España tras una larga carrera en su país, donde había destacado en tiempos recientes dirigiendo a la Fiorentina de Gabriel Omar Batistuta. El Valencia pensó en él como sustituto de Jorge Valdano al inicio de la temporada 1997-98 (el argentino fue destituido en la 3ª jornada). Sus comienzos no fueron fáciles ya que tuvo que cambiar por completo la fisionomía del equipo. Una de sus primeras decisiones fue dar el visto bueno a la salida definitiva de Romário, y más tarde tendría problemas con el "Burrito" Ortega. Tras ganar la Copa del Rey se marchó al Atlético de Madrid, club en el que se convirtió en un nuevo damnificado de la familia Gil, cobrando un sustancioso finiquito eso sí; una constante en su carrera. Volvería a Valencia en 2004 para fracasar estrepitosamente y ser cesado pocos meses después.

Lo mejor:

Al principio sus métodos funcionaron. Supo encontrar las virtudes de su equipo y aprovechó la velocidad de Claudio López para hacer del Valencia uno de los conjuntos más peligrosos del campeonato. Recolocó a Mendieta en el centro del campo, un hecho decisivo en la explosión del centrocampista. Sus ideas llevaron al Valencia a la senda de los títulos tras casi dos décadas de sequía.

Lo peor:

Su poca flexibilidad para intentar adaptar aquello que no entraba en sus planes al principio, algo que también se notó en el estilo de juego. Gracias a la velocidad de sus puntas logró hacer del pelotazo un recurso válido, pero únicamente efectivo cuando el rival dejaba mucho espacio en su retaguardia. Ante equipos pequeños al Valencia le costaba demasiado sacar los partidos adelante. Una vez en el Atlético Hasselbaink fue su punta de lanza, pero el equipo comenzó su caída a los infiernos con Ranieri (descendió al finalizar la temporada). Años más tarde aterrizó en Valencia y el club se llenó de italianos; tras el doblete conseguido la temporada anterior el equipo no pudo ni clasificarse para la Copa de la UEFA en el siguiente.

La anécdota:

Cuando se especulaba con la renovación o no de su contrato con el Valencia en la primera etapa, argumentó que la razón principal de que se marchara de la ciudad era que no existía un colegio italiano para su hija.

ARRIGO SACCHI

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Uno de los grandes maestros de la táctica en la historia del fútbol, sus ideas dieron un impulso al fútbol italiano de finales de los ochenta. Posteriormente llevó a la selección transalpina a la final de la Copa del Mundo de 1994, y tras un breve retorno a la disciplina del club presidido por Berlusconi recaló en uno de los banquillos más complicados del fútbol europeo de la época: el del Atlético de Madrid.

Su llegada coincidió con la salida de su compatriota Vieri del equipo. El poderoso delantero había sido el buque insignia del Atlético durante la temporada anterior, pero decidió cambiar de aires tras recibir una suculenta oferta de la Lazio. Con Sacchi llegaron Torrisi y Serena, dos jugadores de corte medio-bajo

Lo mejor:

Pocas cosas se pueden destacar de su paso por los banquillos de la primera división. Sólo estuvo unos meses, pero quizá el buen juego de ataque desplegado en las tres eliminatorias de la Copa de la UEFA que disputó sea la mejor parte de su bagaje.

Lo peor:

Sacchi no fue nunca en Madrid el técnico que se recordaba de su primera etapa en Milán. No demostró carácter y se mostró siempre ajeno a la realidad del equipo. Falta de sintonía con sus jugadores y una alarmante distancia entre el juego propuesto y el desplegado forzaron su salida del equipo.

La anécdota:

Uno de los hombres que animó a Sacchi a aceptar la oferta del Atlético fue Ancelotti. El entonces técnico del Parma declaró:

"Arrigo hace bien en irse a España. En Italia habría tenido problemas. Y si ha decidido irse al Atlético es porque el conjunto madrileño cree en él y ha aceptado todas sus peticiones".

GIANNI DE BIASI

El Levante le fichó en la temporada 2007-08 para llevar el timón de un equipo a la deriva. El actual seleccionador de Albania demostró pronto sus dotes de "Gentleman"y la ironía en su vocabulario, pero futbolísticamente aquel conjunto azulgrana estaba para pocos trotes, situándose pronto como uno de los grandes candidatos a ser carne de segunda al finalizar la temporada. A pesar de ello el italiano consiguió enderezar el rumbo en parte, ya que con Abel Resino, su predecesor, el Levante sólo fue capaz de sumar un punto en 7 encuentros.

Lo mejor:

Inculcó grandes dosis de orgullo al equipo, que incluso llegó a tener alguna esperanza de salvarse durante la temporada.

Lo peor:

Pese a que mejoraron el rendimiento respecto al ofrecido con Abel, el Levante fue colista prácticamente durante toda la liga.

La anécdota:

Abandonó el Levante a pocas jornadas para la conclusión del campeonato 2007-08 para firmar por el Torino. El Levante perdió la categoría y el "Toro" logró salvarse.

ENZO FERRARI

Llegó al Zaragoza procedente del Udinese en 1984. Se le prometió que Jorge Valdano y Salva continuarían en el equipo, pero finalmente no fue así. El equipo de los Cedrún, Casuco, Canito o Amarilla, comenzó muy mal el campeonato de liga ya que no ganó en ninguno de sus tres primeros encuentros. Mejoraron su rendimiento a mitad de temporada, e incluso llegaron a soñar con la posibilidad de conseguir la clasificación para competiciones europeas, pero una nueva caída en la parte final de la temporada le llevó a una discreta décima posición en la tabla. Ferrari abandonó el Zaragoza al cumplir su primera temporada en el club.

Lo mejor:

Intentó formar una defensa más sólida que la que había mostrado Leo Beenhakker en tiempos anteriores. Intentó sacar rendimiento a pesar de que no le ofrecieron la plantilla que le habían prometido. Con todo, el Zaragoza estuvo cerca de jugar la final de copa; se despidió de la competición en semifinales, el día en el que Ferrari también se sentó por última vez en el banquillo de La Romareda antes de volver a su país para dirigir a la Triestina.

Lo peor:

No consiguió ninguno de sus objetivos ni logró que el Zaragoza volviera a jugar en Europa, el gran reto que la directiva le pidió.

La anécdota:

Fue el primer técnico del Zaragoza que consiguió ganar al Real Madrid en su estadio en el campeonato de liga.

SANDRO PUPPO

Sandro Puppo era un experimentado estratega italiano al que el Barcelona concedió el puesto de entrenador del primer equipo en la campaña 1954-55. No tuvo fortuna ya que el equipo no pasó del segundo puesto en la liga.

Lo mejor:

Un buen arranque en el campeonato español en el que el Barcelona no conoció la derrota hasta la sexta jornada.

Lo peor:

Su mala relación con parte de la plantilla y el hecho de que César Rodriguez, el mítico goleador barcelonista, dijera adiós al club con él en el banquillo.

La anécdota:

La selección española quedó eliminada antes de llegar a la fase final del mundial de 1954 por Turquía. El bambino Franco Gemma y el aguerrido conjunto otomano obligaron a España a seguir el campeonato desde la barrera. A Turquía le entrenaba Sandro Puppo.

EL DEBATE: ¿TRIUNFARÁ ANCELOTTI EN EL REAL MADRID?