Copa Confederaciones 2013: el torneo más goleador de la historia
El mundial de 1954 es el único en el que se marcaron más de 5 goles por partido

La primera fase de la Copa Confederaciones 2013 ha sido muy prolífica en materia goleadora, de momento se marcaron 58 en 12 partidos, una media de 4,83 por encuentro. A lo largo de la historia de los grandes torneos de selecciones, sólo en una ocasión se marcaron más de 5 goles de media por partido; fue en el campeonato del mundo de 1954.
La selección de Tahití se ha marchado de la Copa Confederaciones con 24 goles en contra, una marca que al margen de representar la mayor cantidad de tantos encajados por un equipo en la fase final de un campeonato, también ha ayudado a que el torneo de este año se haya colocado a la altura de los más goleadores de la historia. A falta de cuatro partidos para finalizar, la media de goles se ha situado como la más alta en la historia de la Confederaciones. Repasamos los mundiales, Eurocopas y Copas Confederaciones con una media de goles más alta:
Suecia 1958, 126 goles en 25 partidos (3,6 goles por encuentro)
En octava posición de la lista histórica de campeonatos con una media de goles más alta se sitúa el mundial celebrado en Suecia en 1958. En aquella cita el francés Just Fontaine se proclamó máximo goleador con la mayor cifra de goles alcanzada por un jugador en un sólo campeonato en toda la historia, un total de 13. La campeona Brasil anotó 16 goles en 6 partidos, una cifra en la que fueron decisivas las goleadas conseguidas en la semifinal y la final frente a Francia y Suecia respectivamente, en ambas marcaron 5 goles.
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Uruguay 1930, 70 goles en 18 partidos (3,88 goles por encuentro)
Fue la primera cita mundialista de la historia, un campeonato que pasó a la historia por el triunfo de la celeste uruguaya y también por las grandes ausencias que oscurecieron en parte el campeonato. Guillermo Stábile, el filtrador de Buenos Aires, fue el máximo anotador del torneo con 8 goles. En todos los encuentros de semifinales y final se marcaron al menos 6 tantos.
Italia 1934, 70 goles en 17 partidos (4,11 goles por encuentro)
En el siguiente campeonato de mundo se marcó el mismo número de goles que en la cita anterior, aunque se necesitó un encuentro menos para alcanzar la marca. Italia protagonizó la mayor goleada tras batir en la primera ronda por 7 goles a 1 a Estados Unidos, sin embargo el equipo transalpino no destacaría por ofrecer una gran efectividad goleadora en el resto del torneo. Italia 1934 logra situarse con su media de más de 4 goles por partido en la 6ª posición histórica.
Euro 1960, 17 goles en 4 partidos (4,25 goles por encuentro)
La primera edición de la fase final de la Eurocopa de naciones también destacó por una gran efectividad goleadora. Unión Soviética, Yugoslavia, Checoslovaquia y la anfitriona Francia, demostraron un gran nivel de cara a puerta. El partido más espectacular fue la semifinal en la que Yugoslavia se impuso 4-5 a Francia en el parque de los príncipes. A diferencia de otros torneos, en esta edición sólo se jugaron cuatro partidos, por lo que la media goleadora se resiente gracias a resultados muy concretos.
Copa Confederaciones 1992, 18 goles en 4 partidos (4,5 goles por encuentro)
El argumento expuesto para el torneo anterior también sirve en el caso de la Copa Rey Fahd (antecedente de la Confederaciones) 1992. Argentina se llevó el título de un torneo en el que marcó 7 goles en dos partidos. La endeblez defensiva de Costa de Marfil también fue decisiva en que se alcanzaran cifras goleadoras tan altas; los africanos encajaron 9 goles en sólo dos encuentros.
Francia 1938, 84 goles en 18 partidos (4,66 goles por encuentro)
En su día fue el campeonato con un promedio más alto. Con 4,66 goles por partido todavía se mantiene como el tercer mejor campeonato en este apartado de la historia. El brasileño Leonidas fue el máximo goleador con 7 tantos a pesar de que no jugó la semifinal. Italia ganó el título con una media de 2,75 goles por partido, inferior al número absoluto del campeonato.
Euro 1976, 19 goles en 4 partidos (4,75 goles por encuentro)
La Eurocopa de 1976 será recordada por el histórico lanzamiento de penalti de Panenka, pero también por la gran cantidad de goles que se marcaron durante los cuatro encuentros que se jugaron. Una extraordinaria semifinal entre Alemania y Yugoslavia abrió el fuego con 6 goles en semifinales, que acompañados de los 4 que se marcaron en el Holanda-Checoslovaquia elevaron considerablemente la media.
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Suiza 1954, 140 goles en 26 partidos (5,38 goles por encuentro)
Los 11 goles de Sandor Kocsis y partidos tan sorprendentes como el 7-5 entre Austria y Suiza, el 9-0 de Hungría a Corea o el empate a cuatro entre Inglaterra o Bélgica, ayudaron a que Suiza 1954 sea la fase final con una media de goles por partido más alta. La final del campeonato, conocida como la del “milagro de Berna” tampoco defraudó; Alemania venció a Hungría 3-2.