Shaquiri pone el morbo en el Basilea - Bayern de Munich
El internacional suizo centrará miradas en estos octavos por enfrentarse a su futuro equipo


Hace unas semanas el Bayern comenzó una campaña de 'hype' en torno a un anuncio de un fichaje sorprendente que mantuvo a sus hinchas y a los aficionados en general pendientes de su página en una conocida red social, lugar donde se anunciara la nueva incorporación. Finalmente, no se presentó a ningún jugador sino una nueva aplicación donde 'se presentaba al aficionado' como nuevo fichaje. La idea, a parte de tener un guiño con sus incondicionales fue una maniobra encubierta para ganar más fans en la red social. Si bien sí que sirivió para mejorar su posición dentro del top en las redes sociales, a sus aficionados no les hizo ninguna gracia y el club bávaro tuvo que pedir disculpas por la acción de marketing.
Seguro que no se sentirían tan mal como para tener que ofrecer el anuncio de un fichaje 'real', pero finalmente se hizo: El Bayern anunció hace unos pocos días que a partir de la próxima temporada contarían con Xherdan Shaquiri en su primer equipo. Un fichaje que parece una gran operación por la velocidad y buen precio (ocho millones de euros recibirá el Basilea) de uno de los jóvenes con más proyección en el Viejo Continente.
Hoeness ya había anunciado que a pesar de las importantes bajas que ha ido sufriendo el equipo en este primer tramo de la temporada no reforzarían al equipo en invierno... pero no comentó nada de trabajar de cara al próximo verano. Shaquiri lleva un par de años jugando a un buen nivel y su nombre se había colado en la agenda de varios equipos de primer nivel europeo y su buen papel en el pasado Europeo sub21 le sirvió como presentación a nivel mundial.
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Hasta aquí todo sería normal: un grande trabajando bien para incorporar a un joven jugador a su equipo. El problema, para algunos, es cuando se anuncia la operación. El Bayern empató a dos en el clásico del fútbol alemán ante el Hamburgo, mientras que el Borussia de Dortmund ganaba con solvencia al Nurenberg a domicilio, metiéndole los dos puntos de diferencia que les permiten mirar desde lo más alto al gigante de Baviera y sin síntomas de que sea algo efímero (más teniendo en cuenta que ya no tienen preocupaciones por competiciones europeas). Incluso aún resonaban ecos de su mal partido ante el 'Gladbach un par de jornadas antes.
Qué mejor manera de levantar el ánimo que anunciar un fichaje ilusionante, pensarían en Munich. Salvo que hablamos del mejor jugador de tu próximo rival en Champions.
Y es que el bombo, hace un par de meses, emparejó al Basilea (líder en Suiza) con el Bayern en el camino hacia la final en el Allianz. Vale que los suizos se cargaron al United, pero dentro de lo que podía caer, era el rival menos potente que se podrían encontrar en su camino hacia la ansiada final en su casa. Un pequeño guiño hacia el equipo, seguramente, que puede competir contra los dos españoles en liza y máximos candidatos a llegar a la final. ¿Os imagináis al Barça anunciando la contratación de Sam o al Madrid la de Doumbia dos semanas antes de verse las caras en Champions? No sería una situación cómoda.
No es la intención de este artículo poner en duda el honor y la responsabilidad de ninguno de los integrantes de esta pequeña novela futbolística ambientada en el bonito marco centroeuropeo, pero no estaría de más dar un pequeño tirón del orejas al Bayern de Munich por, de entre todos los días que hay hasta el uno de julio, teniendo cerrada la operación, anunciarla a dos semanas de el partido más importante en la historia reciente del Basilea.
¿Qué pasaría si Xherdan hiciera un mal partido ante el Bayern? Seguro que algún radical se lo echaría en cara.