El Ying Yang de Zlatan Ibrahimovic
El delantero sueco muestra una doble cara
Dicen que los genios se entremezclan entre la picardía, una doble personalidad y unas condiciones innatas que en su conjunto forman seres especiales, diferentes y en muchas ocasiones inalcanzables para el resto.
En el fútbol, como en todos los ámbitos de la vida, existen jugadores que están por encima del resto, que destacan notablemente por unas facultades naturales y que les convierten en futbolistas reconocidos a nivel mundial.
Zlatan Ibrahimovic, delantero de origen sueco que milita en las filas del AC Milan. Un genio dentro de los terrenos de juego y un auténtico regateador fuera de ellos. Retador regular, constante, continuo. Palabras transparentes, directas y en un alto porcentaje de las ocasiones con carácter polémico.
Excelente y productivo cuando se viste su respectiva camiseta, actualmente la del AC Milan. Polémico y extravagante cuando el colegiado pita el final. Auténtico poseedor del Ying-Yang, del bien y del mal. Una bipolaridad que le convierten en incontrolable, en un personaje público inesperado, que siempre promete ante las preguntas comprometidas de los periodistas.
Una de las pocas personas que utilizan la provocación y la ironía para referirse a uno de los considerados mejores entrenadores del Mundo como es el caso de Pep Guardiola. Un futbolista capaz de gastar bromas absurdas y con carácter casi violento como una patada voladora hacia un compañero ante el asombro de éste. Un jugador capaz de mandar callar a su propia afición.
La cara y la cruz. El bien y el mal. El día y la noche. Cientos de situaciones antagónicas podrían resumir la personalidad de Zlatan Ibrahimovic, un delantero que cuenta con el cartel y la estrella de los denominados mejores delanteros del Mundo. No importa la camiseta que defienda, siempre responderá con el mejor de sus rendimientos. Da igual que vista los colores del considerado mejor equipo del Mundo en la actualidad (de donde salió por la puerta de atrás), no importa que haya militado en tres de los mejores equipos de la Serie A como Juventus de Turín, Inter de Milán o AC Milan.
Siempre Ibrahimovic, con su lado bueno y su lado malo. Actualmente sigue mostrando su lado bueno, que siempre acaba destacando por encima del negativo. A sus 30 años está logrando una vez más una temporada digna de elogio y sus 14 goles en 16 partidos disputados de la Serie A le convierten en el principal estandarte para el conjunto rossonero mantenga sus opciones al título de la Península Itálica.
Un jugador que nunca se arruga, que responde a las críticas y que responde en todos los ámbitos, marcando goles y ante los medios. Quizás maleducado, tenso, pero un jugador sensacional que mantiene sus galones gracias a un envidiable rendimiento.
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Siempre Zlatan, siempre un rendimiento excelente, pese a su lado salvaje, polémico y extravagante.
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