El Gladbach quiere luchar contra el Bayern como en los setenta
El primero de los perseguidores de los bávaros
Han habido pocos cambios en la plantilla del Bayern de Munich, pero muy importantes: Neuer es el nuevo portero y Rafinha da 'el relevo' a Philip Lahm en las subidas desde el lateral. El resto llegadas para rotaciones o pensando en el futuro. Y claro, Heynckes en el banquillo. Su buena temporada al frente del Leverkusen el año pasado le valió para ser el elegido para iniciar la era post Van Gaal.
Seguro que el que fuera técnico del Athletic, Tenerife o Madrid, ve como se le escapa una sonrisa al mirar la tabla clasificatoria y ver que el Borussia Monchengladbach es el primero de los equipos que ha cierta distancia (cinco puntos) tratan de dar caza al cuadro muniqués antes del parón hivernal. Porque el téncico del Bayern fue uno de los protagonistas en la lucha deportiva que Bayer y Gladbach protagonizaron en la década de los setenta.
El equipo de Munich dominó la primera mita de los setenta consiguiendo tres títulos ligueros de manera consecutiva, una Copa y una Copa de Europa. Con Franz Beckenbauer, Gerd Muller, Sepp Maier sobre el campo y Udo Lattek en el banquillo dirigiendo al equipo.
Mientras los bávaros maravillaban al mundo, el Gladbach iba armando el equipo que tomaría el relevo en el mando liguero en Alemania. Fueron 'Die Fohlen' los que primero con Hennes Weissweiler en el banquillo y después con el mismísimo Udo Lattek quien ganó las Bundesligas de 1975, 1976 y 1977 y las Copas de la UEFA del 75 y del 79. Año mágico fue ese 1977 porque llegó a disputar la final de la Copa de Europa cayendo ante el Liverpool de Kevin Keegan.
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Hubiera sido un gran broche a unos años maravillosos pero con Rainer Bonhof (que más tarde llegaría al Valencia), Uli Stilike, Berti Votgs y el actual entrenador del Bayern, Heynckes como goleador había una base como para que aquella final no fuera la última. Pero tras ese hito sus estrellas fueron saliendo con el objetivo de mantener los balances del club en orden, pero no encontrando un relevo sobre el campo de calidad.
Así, pasó de ser una potencia europea a poco a poco ir bajando el nivel, dando alguna sorpresa en Copa (un par de subcampeonatos en el 84 y el 92 y un título en 1995) tocando fondo cuando descendió en 2007.
Ahora, cuatro años después, el calendario del campeonato ha sido lo suficientemente asumible como para haberse convertido en el primero de los perseguidores del Munich, reeditando hasta el momento, el bonito duelo clasificatorio que nos brindaron hace cuarenta años... aunque quizás con un juego no tan vistoso como entonces por su parte. ¿Sera Reus el líder sobre el campo que tanto tiempo han esperado?
