Venezuela golpea a Chile en dos balones parados

Había mucho optimismo en los dos equipos que cerraron la ronda de cuartos de final por su trayectoria en el torneo: Venezuela venía de hacer buenos resultados y con un fútbol convincente, mientras que Chile se había postulado como el equipo que mejor juego había mostrado y las caídas de otros candidatos la metían de pleno en la lucha.

El equipo de Borghi salió con su patrón de siempre pero se encontró a una Venezuela que había estudiado bien cómo atar a Alexis Sánchez y frenar a Suazo. Esto volvió el juego de los chilenos muy previsible y permitió a Venezuela tener más ocasiones de gol aunque fueran siempre fruto de algún disparo lejano. Pero esto les permitía no dar pie a contraataques.
Pasada la media hora Venezuela encontró el gol: Juan Arango centró una falta desde la derecha que remató con contundecia Vizcarrondo, aprovechando un ‘lavado’ por parte de sus compañeros que le dejó espacio para entrar al remate solo.
El gol calmó algo el ímpetu de la ‘Vinotinto’ que retrasó sus líneas sin perder el orden de marcas y ayudas. Sólo a balón parado pudo Chile retomar la igualada.

La segunda parte, con la entrada de Valdivia, se tiño de rojo: Chile comenzó a asemejarse más al de la fase de grupos con más movimiento y comenzó a poner cerco a la portería de Vega con ocasiones de todo tipo.
Parecía que el empate era cuestión de tiempo cuando Suazo primero y Valdivia después, se encargaron de ‘calibrar la portería’ tras enviar sendos disparos al larguero. Y así fue, en una jugada de Alexis Sánchez por la derecha en la que apuró y encontró con su centro a Suazo quien logra crearse un espacio para armar un disparo potente que, tras golpear como no en el larguero, es cuela estableciendo un empate que hacía justicia con veinte minutos por delante.

Pero Venezuela, que había sufrido por tener algo de continuidad en su juego de ataque, volvió a encontrar petróleo en una jugada parecida a la del gol, con una falta lateral que lanzó Arango y que contó con la inestimable ayuda de Claudio Bravo quien dejó el balón muerto para que Chíchero la colara para adentro. El zaguero de Newell’s firmó un encuentro con participación clave en la victoria ya que además de ese gol sacó con el 0-1 un balón bajo palos y, en extraño escorzo, evitó el empate a dos en la última jugada del partido con Vega batido.

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Así, Venezuela eliminó a una de las favoritas y confirmó un pleno de sorpresas en esta ronda de cuartos.