Los fracasos de Inglaterra Sub 21

Se esperaba mucho de Inglaterra, entre otras cosas porque jugaba prácticamente en casa ya que arrastró un gran número de seguidores, pero que se ha quedado fuera a la primera de cambio sin ningún tipo de paliativo.
Después de dos pírricos empates, uno contra España, con más suerte que juego, deja el Europeo con un regusto muy amargo puesto que, su última actuación en una competición similar, fue en el Europeo de Suecia, llegando a la final contra la Alemania de Ozil aunque cayendo 4-0.
Pero hablemos de los nombres donde se plasma el fracaso:
Sturridge: Delantero del que se esperaba lo mejor. Daniel procede de la prolífica cantera de Manchester City pero que se ve ensombrecida en los últimos años por el talonario del jeque de turno. Ya hace 3 años que debutó en la Premier League siendo fichado un año después por el Chelsea. Difícil destino se buscó para poder triunfar ante otro magnate con talonario flojo, en este caso, en idioma ruso. Acabó el año pasado en el Bolton siendo una referencia en ataque y demostrando lo que podía llegar a ser.
Rodwell: Otro de los que se le esperaba como la solución en el centro del campo siendo el cerebro de la nueva Inglaterra de los próximos años. Ni frenó a los contrincantes ni creó juego para los suyos.
Pearce: Un entrenador que se las prometía muy felices en el pasado Europeo de Suecia cuando pudo llegar a la final. A pesar de ello, han pasado los años y no ha impreso ningún esquema de juego sólido siendo siempre salvado por las individualidades, que no fueron pocas en el anterior campeonato. Típico entrenador inglés que busca, en la superioridad física y el juego de choque, el poderse llevar balones a la meta rival pero que contra equipos más creativos no ha tenido nunca claro como jugarles.
Smalling: Muy difícil lo tuvo cuando llegó al Manchester United puesto que sus principales contrincantes en su puesto eran Vidic y Ferdinand, además de Brown o Evans. A pesar de ello y gracias a los problemas en forma de lesiones de alguno de ellos, le han hecho jugar más de lo que él mismo esperaba, incluso en partidos de extrema importancia en Champions. Smalling ya ha sido convocado en la selección inglesa absoluta y ha demostrado un saber estar de central con 30 años cuando sólo cuenta con 21. Sus errores infantiles le han hecho pasar un Europeo difícil.