Eden Hazard
El año que viene no jugará en Francia
Mucho se ha hablado durante la temporada de Romelu Lukaku del Anderlecht como la gran esperanza Belga. Algo menos de Eden Hazard. Bien es cierto que un tal Zinedine Zidane, algo puesto en esto del fútbol, lo nombró para ingresar en el selecto club blanco, que ahora representa, ya en el año 2009.
De momento, acabados de cumplir los 20 años, hace pocos meses, este centrocampista ofensivo-extremo-mediapunta, bastante indefinible por las múltiples posiciones en el campo en que actúa con su equipo, el Lille francés, es perseguido por multitud de equipos a los que sólo frenan los múltiples ceros que pide para su traspaso el club de origen.
Los que tenemos más años podemos recordar en él a Vicenzo Scifo, considerado uno de los mejores jugadores belgas de las décadas de los 80 y 90 ya que tienen un similar físico, posiciones en el campo afines e incluso nacieron en el mismo lugar. Además, podemos jugar a videntes y podemos observar su futuro más allá de Francia, en Italia, como Scifo.
Eden, ha debutado ya en la selección Belga absoluta y fue uno de los valladares que tuvo la selección Sub-17 que llegó hasta semifinales del campeonato europeo de la Categoría. Además, el año 2009 consiguió coronarse como el “mejor jugador joven” de la Ligue 1.
Durante la jornada del pasado fin de semana marcó el único gol de su equipo en la victoria sobre el Nancy, con lo que prolonga el sueño de su equipo en conseguir el campeonato francés, que, muy probablemente, sea realidad esta jornada.
Este genio del desborde y el regate en carrera se asemeja a un duende, como lo describía su entrenador en una entrevista, a pie de campo, después de un partido de la copa gala.
Eden, maneja perfectamente los dos flancos del campo siendo su pierna derecha la más resolutiva aunque maneja la izquierda de manera más que correcta. Tiene buen tiro de media distancia y tiene una técnica soberbia. Podríamos comparar a este jugador con el asentado Nasri o con otra promesa similar como Wilshere, ambos del Arsenal.
Jugadores como este, Lukaku o Defour, es lo que necesita el fútbol Belga para renacer.

