¿Qué hay detrás del espectáculo?

La AFE denuncia la sombra del fútbol

Esta misma semana Luís Rubiales, presidente y máximo representante de la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles), hizo públicas unas declaraciones en las que aseguraba que, teniendo en cuenta la actual situación económica que viven muchos clubes españoles, la disputa y comienzo de la próxima temporada 2011/12 corre peligro de poder llevarse a cabo.

Todo comenzó cuando surgió la polémica del no cobro por parte de algunos jugadores de la plantilla del Racing de Santander, a los que el club cántabro les debe la cantidad de 1,7 millones de euros en sueldos. Rubiales hizo acto de presencia en Santander y, tras informarse de la situación de la plantilla racinguista, afirmó a los medios la situación de cara a la próxima temporada.

Una situación que tiene en el Racing de Santander tan solo un ejemplo, ya que se contabiliza entre 200 y 300 jugadores el total de profesionales afectados por impagos, tal y como confirma el máximo representante de la AFE.

El comunicado afirma que, si el próximo mes de agosto (fecha en la que comienza el campeonato) no se han liquidado las deudas con todos los jugadores, la Liga BBVA en su próxima campaña no dará comienzo. Es decir, la AFE hará uso del derecho a huelga y se paralizará el inicio del campeonato. El motivo de la 'advertencia' a estas fechas es para evitar parar la competición futura una vez iniciada y afectar con el correspondiente parón a aficionados, televisiones y demás interesados en el mundo del fútbol.

Luís Rubiales compara la situación del fútbol español con la de la Premier League. En Inglaterra cualquier equipo debe presentar avales y pruebas evidentes de que van a transcurrir de manera solvente a lo largo de la temporada. En este aspecto hizo hincapié dado las últimas compras de clubes españoles por parte de inversores extranjeros que, como en el caso del Racing de Santander, siguen sin llevar a cabo el pago de las deudas.

En el caso del conjunto cántabro la AFE defiende la voluntad de los jugadores afectados, ya que decidieron por medios y decisión propia el aplazamiento de los pagos con tal de facilitar el pago y a día de hoy todavía siguen sin recibir el cobro de sus sueldos.

Situaciones como estas aumentan las distancias en el conocido debate en torno a cuál es la mejor liga del Mundo. Las diferencias con Inglaterra del fútbol español sigue acentuándose año tras año, y hechos como estos no facilitan la escalada por lograr el primer puesto.

La AFE denuncia la actuación de los clubes españoles a los que se le pide que se acoplen a las condiciones de cada uno y no aspirar a situaciones, acciones que no puedan cumplirse y finalmente acabe afectando a los factores esenciales de este deporte, los futbolistas, y en consecuencia a los aficionados.

Rubiales afirma, además, que las relaciones de la AFE con la RFEF y la Secretaría del Estado para el Deporte son excelentes, es cuando entra en acción la relación con la Liga de Fútbol Profesional, situación en la que aparecen los enfrentamientos de intereses y el entendimiento por ambas partes no hace acto de presencia.

Desde algunas partes del conflicto se ha afirmado que la AFE, con Rubiales a la cabeza, desean y quieren el máximo protagonismo posible, premisa que ha negado el organismo de futbolistas defendiendo que su único deseo es el de conseguir la igualdad y que se cumplan los pagos, ya que al fin y al cabo los futbolistas son trabajadores y por ello deben recibir los cobros cuando antes.

El trabajo y seguimiento de la situación por parte de Rubiales y el máximo organismo de representación de futbolistas ha sido llevado a cabo de cerca, ya que han hecho acto de presencia en todos y cada uno de los clubes afectados.

Teniendo en cuenta la situación de impagos la AFE denuncia además que, a parte de los pagos, se consigan y lleven a cabo medidas serias para evitar situaciones de este tipo en el futuro que cada día, lamentablemente, afectan a mayor cantidad de jugadores profesionales.

Hay que tener en cuenta que a nivel profesional se tienen en cuenta los clubes que se desenvuelven en Primera y Segunda División, es decir, en estos casos es posible llevar un recuento más directo. Sin embargo, a partir de Segunda División B hacia abajo los casos son numerosos y por militar en divisiones menores no menos importantes.

La AFE defiende la idea de que si todo sigue igual que hasta ahora, sin un control exhaustivo, las Ligas tal y como se conocen a día de hoy, acabarán cayendo fruto de la extinción.

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