Messi al borde del colapso

Después de la exhibición dada por Messi en el tercer clásico, el argentino, y contra su voluntad, va a tener que parar al menos durante un partido si quiere estar en condiciones de disputar el partido del próximo martes ante el Real Madrid.

El diez culé, esta temporada, lo está jugando absolutamente todo y casi no tiene tiempo para el descanso. Ha batido su récord goleador anotando 51 goles en 50 partidos oficiales que lleva disputados y todo el mundo se pregunta si podrá aguantar el ritmo en este tramo final de temporada.

El propio jugador es el primero que no quiere ni escuchar la palabra descanso y al cuerpo técnico siempre que se le pregunta sobre la carga de partidos se asegura que con Messi sobre el terreno de juego "el equipo está mucho más tranquilo" tal y como declaró Tito Vilanoba, segundo de Guardiola.

Hay que recordar que durante esta temporada los meses de marzo y julio han sido los más complicados para Messi ya que ha tenido que disputar más de un partido con fuertes molestias e incluso se llegó a perder el compromiso de la albiceleste frente a Costa Rica y Guardiola tuvo que reservarlo en un campo complicado como el Madrigal.

Con ocho puntos de ventaja sobre el Madrid y con tan sólo quince en juego quizás sea el momento para que Messi descanse cuando todavía quedan dos grandes citas por delante, la vuelta en el Bernabéu y presumiblemente la finalísima de Wembley.