Lo que le faltaba

Nos levantamos hoy con una muy mala noticia: Adriano Leite, delantero del Corinthians, se ha roto el tendón de aquiles y estará cinco meses de baja.

A un mes del inicio del Brasileirao, el club brasileño se queda sin su delantero estrella y con un margen muy corto para hacerse con un jugador tan determinante como se esperaba que fuera ‘L’Imperatore’ para competir en un torneo que se presenta esta año más reñido que nunca.

A nivel individual habrá que ver cómo se recupera el ex delantero del Inter, Parma, Roma y Flamengo de esta grave lesión, pero más que a nivel físico, a nivel anímico, ya que su vuelta a Brasil tras un decepcionante paso por Roma, se presentaba como la última oportunidad para recuperar el status que un día tuvo y que él solo, con su poco profesional estilo de vida, se encargó de echar por tierra.

Fichado por el Inter de Milan con la mayoría de edad recién estrenada, muchos recuerdan su ‘presentación en sociedad’ cuando marcó un impresionante gol de falta en un amistoso ante el Madrid. Ese chico tenía algo y había que seguirle.

Sin sitio en aquel Inter, buscó minutos en una Fiore que se secaba las lágrimas tras el adiós de Batistuta y regalo goles en un Parma mucho mejor que el que vemos ahora, que le valieron una nueva oportunidad de neroazzurro.

Y aunque no llegó jamás a firmar cifras de ‘cappo canioneri’, su juego, la manera que tenía de causar problemas a la zaga rival gracias a su potencia física y a su amplio abanico de recursos, le hizo un nombre en el panorama europeo y un dignísimo heredero de Ronaldo en la ‘canarinha’.

Pero mientras su fama crecía, su mala asimilación de este nuevo status también lo hacía: el alcohol y la noche cada vez tenían más peso hasta el punto de protagonizar uno de los episodios más extraños en los últimos años del fútbol de primer nivel cuando, aprovechando un viaje a Brasil para jugar con la selección estuvo desaparecido unos días. Después, supimos que se refugió en la favela en la que creció y que el motivo de su aparición era para pedir al Inter que le dejara quedarse en Brasil .

Aquí empezó el fin de Adriano como futbolista de primer nivel.

Algún fogonazo en el Sao Paulo, una campaña correcta en el Flamengo y un paso lamentable en modo y forma por la Roma precedieron a su llegada al ‘Timao’ con el que seguramente no llegue a disputar ningún encuentro en esta primera mitad de la temporada.

Para un delantero en el que el estado físico es clave en su juego, esta poca profesionalidad a la hora de llevar su carrera fuera del campo y el sufrir una lesión de este tipo, podría suponer un punto y final, rozando la treintena, a su carrera si quiere volver a ser decisivo.

Por el bien de Adriano, del Corinthians y del fútbol, esperemos que el tiempo de inactividad le sirva para ordenar sus prioridades y darse cuenta de lo afortunado que ha sido en comparación con otros ‘garotos’ de Vila Cruzeiro.