El renacer de Robin

Robin Van Persie es un jugador neerlandés de 27 años que milita en el Arsenal. Hasta aquí, conocido por todos, aunque algo olvidado en los últimos tiempos.

Considerado uno de los mejores delanteros del viejo continente, desde su llegada en el año 2004 al por aquel entonces estadio de Highbury, ha ido logrando el apoyo y cariño de la afición gunner hasta convertirse en todo un ídolo, pese a que en el último año y medio su fuerza se ha ido diluyendo.

Indiscutible tanto en su club como con Holanda Van Persie ha cosechado hasta la fecha cifras goleadoras dignas de uno de los mejores delanteros de la historia del conjunto londinense. Desde su aterrizaje en la capital londinenses ha logrado a fecha de hoy la interesante cifra de 88 goles en 221 encuentros disputados. Números que le colocan en niveles de gran delantero centro. Con Holanda sus números tampoco pasan desapercibidos, su último gol el pasado viernes en el encuentro correspondiente a la Fase de Clasificación para la EURO 2012 que enfrentaba a Holanda y Hungría, y cuyo resultado fue de 0-4 favorable al combinado orange.

La tragedia de una grave lesión se cruzó en su camino. El pasado 14 de Noviembre de 2009 el delantero viajaba junto a su selección a la población de Pescara para enfrentarse en un encuentro amistoso a Italia. Un partido que a priori no tenía nada en juego pero que le costó muy caro al actual delantero del Arsenal. Una dura entrada de Giorgio Chiellini hacía que Robin cayera lesionado en los ligamentos de su tobillo derecho.

Un jarro de agua fría para Arsene Wenger, que veía como perdía a su delantero franquicia para la disputa de al menos seis semanas. Un periodo que se alargó hasta los cinco meses y que dejó muy molesto al técnico francés de los cañoneros de Londres.

Su recuperación se esperaba como agua de Mayo en la afición gunner. Sin embargo, los peores presagios acerca de su vuelta a los terrenos de juego se hicieron realidad. La recuperación no trajo con ella el mejor nivel físico y goleador del delantero holandés, que debía afinar la puntería si deseaba llegar a sus mejores registros goleadores.

La presente temporada se presentaba con aires renovados para el jugador, que esperaba dar todo por su club desde comienzos de temporada. Tras realizar un más que notable Mundial de Sudáfrica 2010 con su selección, con la que llegó hasta la Final frente a España, Robin llegaba en forma para volver a las cifras goleadoras que tan buenos recuerdos habían dejado en las retinas de la afición de gunner. Sin embargo, las lesiones volvieron a dejarle en fuera de juego, tras recaer de su pasada lesión de tobillo.

Así, no fue hasta mediados de temporada cuando el delantero de origen neerlandés no pudo coger el deseado ritmo de competición y sus números, tanto con Arsenal como con Holanda vuelven a sincronizarse con aquel delantero temible por las defensas rivales.

Hasta la fecha Robin Van Persie suma la cifra goleadora de 15 tantos repartidos entre Premier League y UEFA Champions League, superando a falta de dos meses de competición los números de la pasada campaña en los que logró tan solo 10 goles.

La importancia de su recuperación ya no se basa en lo que a números se refiere, sino que su presencia en las grandes citas se hace importantísima para el futuro gunner. Tal es así que en la presente temporada no ha faltado a su cita con el gol en encuentros como en la Ida de los Octavos de Final de la Liga de Campeones frente al FC Barcelona o el empate a cuatro frente a Newcastle.

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El killer del Arsenal ha vuelto y lo ha hecho para quedarse. De nuevo, con sus goles, es junto a Cesc Fábregas uno de los pilares básicos del vestuario gunner.

El renacer de un grandísimo delantero marcado por el destino como jugador que quedará marcado en la historia del Arsenal.