Disfrutemos a Neymar

Los futbolistas, casos más y otros menos, viven siempre bajo la lupa de la opinión pública que, ante cualquier eventualidad o comportamiento humano que rompa con la conducta natural de un deportista de alto nivel, crítica sin piedad a los protagonistas y que comienza a generar estereotipos en contra de la figura. Después, a partir de ahí, comienzan a crearse un perfil negativo que acompaña a cada acción del mismo. Se critica a partir de las caras, lo que termina convirtiéndose en un comportamiento normal dentro de la conducta humana.

Un ejemplo claro de esto es Neymar que, en su regreso al Parque de los Principes, dejó en claro que, pese a querer irse de Francia, tiene la intención de brillar y comandar a su equipo en cada uno de sus objetivos. Su desbordante calidad y su capacidad para liderar a partir de lo que hace con la pelota en los pies, fueron el único factor determinante para que el PSG sacara los tres puntos ante un gran Strasburgo (planteamiento acertado a partir del repliegue y circulación de la pelota) en una nueva jornada de la Ligue One. El brasileño volvió a demostrar en qué escenario brilla y deslumbra por encima de la gran mayoría: en la adversidad.

Son pocos los futbolistas, solo se me ocurre Lionel Messi, que superen el brasileño en cuanto a calidad individual, capacidad para liderar con la pelota en los pies y desprolijidad en los escenarios más complicados para su equipo y él mismo, lo que se demostró con su chilena/tijera en una de las últimas jugadas del partido que significaba su regreso al fútbol de clubes después de mucho meses y donde fue abucheado constantemente por los que, a final de temporada, terminarán aplaudiéndole sin parar.

Más allá de analizar su juego, este es un mensaje para los amantes de la pelota y a los que nos maravilla cada gesto técnico de una estrella, es momento que, después de un mes repleto de rumores y trascendidos, disfrutemos al Neymar que salta a los terrenos de juego. Ese que recibe la pelota al pie y siempre busca marcar la diferencia a partir de la gambeta. Ese que siempre busca romper el molde y generar emociones en la grada. Ese que, con la pelota en los pies, es de los mejores del planeta tierra. Olvidemos lo que ocurre fuera de la cancha y démonos la oportunidad de prender nuestra televisión y disfrutar con cada una de sus intervenciones que, como demostró en su regreso y durante toda su carrera, están repletas de ese tacto que maravilloso que genera que cada vez más nos encante este deporte. Disfrutemos a Neymar, a ese que tiene la pelota en los pies.