¿Cómo juega Nicolas Pépé?
La sensación de la actual temporada en Francia, se ha llevado los reflectores de todo Europa por su manera de jugar y por su fuerte irrupción.

La Ligue One se ha caracterizado por ser la cuna del talento individual del balompié europeo. Cada temporada una gran cantidad de jugadores, que maravillan semana a semana en los estadios franceses, despegan y cambian de aires. Uno de esos nombres, que parece que jugará su última temporada en Francia, es Nicolas Pépé que, por encima de nombres propios importantes, se ha llevado todos los reflectores esta temporada en el país campeón del mundo.
Pépé (Costa de Marfil, 29 de mayo de 1995) es un extremo picante que dio ese salto de calidad cuando, de la mano de Marcelo Bielsa, pasó del Angers SCO al LOSC Lille donde comenzó a producir todo lo que lo ha convertido en uno de los mejores jugadores de la Primera División francesa.
Su principal característica yace en su poderosa zancada, una conducción muy potente y una gran capacidad para explotar los espacios, desborda constantemente, porque además no para de hacerlo. Busca participar constantemente en el partido, no le gusta aislarse ni bajar su cantidad de intervenciones, su juego se basa en las repeticiones, en ir constantemente al ataque para hacerle daño al rival una y otra vez hasta que consiga abrirle, como si se tratase de un bisturí. Es una amenaza constante para cualquier defensa, recibiendo al para comenzar a desplazarse con la pelota, que lo hace con una potencia envidiable.
Por otro lado, al poder utilizar ambas piernas, se convierte en un gambeteador que no deja de sorprender. Puede salir por cualquier costado y, como si fuera poco, recibir en cualquier zona y altura para comenzar a ser punzante desde ahí. Su principal problema yace ante la ausencia de espacios para correr y con tantos rivales que le obstruyen el camino al arco rical.
Pépé tiene mucha calidad con la pelota en los pies, la suficiente para dar pases claves y asistencias constantemente, aunque brille más en la fase resolutiva que en la construcción, aunque su presencia en el carril central puede marcar la diferencia. Utiliza su cuerpo para liberarse del rival y encarar. A esto se le tiene que agregar su capacidad imaginativa para resolver diferentes situaciones complicadas a nivel individual y colectivo.
Con su evolución y su gran temporada en la Ligue One, llevando al Lille a la próxima Liga de Campeones de Europa, Nicolas Pepé parece estar listo para dar ese salto a un equipo grande y poder demostrar que está capacitado para marcar la diferencia en los escenarios más imponentes del Viejo Continente.