Pogba para entender al nuevo United
Con el cambio de entrendor, el Manchester United está logrando competir a un nivel muy alto y es un rival a tener en cuenta.

Desde la llegada de Ole Gunnar Solskjaer, el Manchester United ha vivido un cambio radical a nivel futbolístico y anímico. El cambio de entrenador le vino muy bien a una plantilla que, pese a tener buenos jugadores, no está bien conformada pero que ha logrado competir contra Tottenham, Arsenal y Chelsea para entrar en la próxima Liga de Campeones de Europa.
Eliminando al PSG, pese a no merecerlo a nivel de desarrollo de la serie, demostró que es un conjunto que puede competir todavía a un alto nivel sin la necesidad confeccionar un plan de juego bien constituido a comparación de los que tienen, por ejemplo, Liverpool y Manchester City. A solo horas de que enfrente al FC Barcelona por el partido de ida de los cuartos de final de la Champions, que se disputará en Old Trafford, analizaremos en clave el sistema que ha confeccionado el entrenador escoces desde su llegada al Teatro de los Sueños.
El trio de volantes con roles determinados. La línea más competitiva dentro del sistema de Solskjaer, que utiliza normalmente un triángulo en ese sector del campo, es la del medio con la presencia de Nemanja Matic, Ander Herrera y Paul Pogba, tres figuras que, dentro del funcionamiento, tienen roles bastante determinados dentro de la construcción y finalización de la jugada. El serbio, pivote retrasado del triángulo, es el responsable principal de sacar la pelota desde el fondo apoyando constantemente a los centrales en dicha función. El español, rotando constantemente con Matic, interviene también en ese primer pase, desde su costado, busca asociarse constantemente para construir los ataques. El francés tiene un rol más ofensivo pisando área contrario desde la banda izquierda y sumándose constantemente a la zona del delantero centro.
Intervención de los extremos. Con Jesse Lingard y Anthony Martial como extremos, el Manchester United busca verticalizar constantemente por banda y ganar ahí los duelos individuales para ir directo al área. Con el inglés y el francés, Solskjaer libera, a su vez, a los volantes internos para que ellos pisen zonas más adelantadas. Sobre todo por izquierda donde Martial fija por fuera para Pogba tenga libertad de ir para donde quiera. Lingard si cumple con labores más internas para que el lateral pueda utilizar la banda y ser profundo.
Costado derecho y costado izquierdo. Solskjaer confeccionó un equipo para que, en cada carril del terreno de juego, se encuentren responsabilidades puntuales. Por derecha, con Ander Herrera como interior y Jesse Lingard como extremo, el United intenta construir las jugadas de peligro y romper con líneas de presión rival, con el apoyo constante de Matico del mismo delantero que sale de su zona de referencia. Por otro lado, en el costado izquierdo, con Pogba y Martial, buscan siempre ser más verticales y finalizar las jugadas. Una zona más vertiginosa con la misma presencia de Shaw como lateral.
Rashford en punta. Pese a contar con Lukaku, Solskjaer se decantó por Marcus Rashford como delantero centro porque, entendiendo que no es su demarcación principal, el inglés sale de la zona, liberando el carril interior, en búsqueda de sociedad para que la jugada pueda surgir gradualmente desde el fondo. Dicho movimiento potencia mucho más la presencia de Pogba dentro del área rival, porque aprovecha que los centrales rivales pierden la referencia de área principal.
Diversos planes. La pizarra de Solskajer pese a tener un plan reactivo como principal arma, cuenta también con planteamientos donde busca dominar desde el ataque posicional con nombres propios como Ander Herrera y con la presencia de Juan Mata desde el banquillo. No solo depende del plan de recuperación y contragolpe, donde gana mucho con sus extremos rápidos y la llegada desde la segunda línea de Pogba, sino que también puede dominar con un buen manejo de la pelota.