Claves del España 2-1 Noruega | ¿Nace un sistema?
Pese a que el resultado fue corto, los dirigidos por Luis Enrique Martínez fueron ampliamente superiores a su rival de turno.

Con goles de Rodrigo Moreno y Sergio Ramos de penal, España derrotó 2-1 a Noruega en Mestalla y comenzó con el pie derecho las eliminatorias para la Eurocopa 2020. Pese a que el resultado emite sensaciones de que el desarrollo fue mucho más reñido, los dirigidos por Luis Enrique Martínez fueron ampliamente superiores a su rival. El partido, a su vez, dejó rasgos que parecen dejar claro que quiere el ex entrenador del FC Barcelona para su selección.
Aquí le dejaremos cinco claves del triunfo de la Roja sobre Noruega:
Esquema y variantes: Luis Enrique utilizó nuevamente el 4-3-3 como esquema principal con Dani Parejo y Dani Ceballos como interiores por delante de Sergio Busquets y con Marco Asensio y Rodrigo Moreno junto a Álvaro Morata en ataque pero, los pasajes de dominio más prolongado de la selección española se vieron cuando las piezas se movieron y comenzaron a generar superioridades en diferentes sectores del campo. Con Busquets como tercer central, tanto incrustado entre Iñigo Martínez y Sergio Ramos o como zaguero derecho, Jesús Navas tuvo la libertad de proyectarse constantemente por el costado derecho, al igual que Jordi Alba. Con esa puesta en escena, 3-4-2-1, La Roja dominó y generó muchas oportunidades de gol (26), pese a que nunca pudo controlar en su totalidad a los noruegos.
Ritmo y presión. La Roja tenía una clara intención de encerrar a su rival lo más cercano a su arco posible y, para hacerlo de la mejor manera, realizó un presión bastante alta y asfixiante para neutralizar desde el eje cualquier intención de construcción de juego de Noruega y, además, mantuvo un ritmo muy alto al a hora de tener la pelota para darle menos margen a su rival para que se ordenase.
Interior derecho. El partido de Dani Parejo como interior derecho fue maravilloso desde el ámbito individual (90% de efectividad en pases y ganando hasta cuatro duelos) y colectivo ya que, su sola presencia, mejoró mucho la versión que venía mostrando Sergio Busquets. El mediocentro del FC Barcelona necesita de un jugador como él, un organizador de juego, para mostrar sus mejores virtudes en el primer pase y tener un socio con quien juntarse para generarle escenario positivos a los atacantes o a quien termine la jugada.
Triángulos externos. Con la proyección constante de los laterales (Jordi Alba por izquierda y Jesús Navas por derecha), España generó superioridades constantes por los costados con el lateral del FC Barcelona junto a Dani Ceballos y Marco Asensio por izquierda y el carrilero del Sevilla junto a Dani Parejo y Rodrigo Moreno por el otro lado. Dichos triángulos externos fueron clave para generar constantes ventajas para los ofensivos y generar oportunidades de gol en profundidad. Con ello, a su vez, se consiguió demarcar diferentes alturas para que el ataque posicional español tuviera mucha mejor fluidez para adelante.
Conclusión: España, más allá de ganar de manera ajustada, tuvo uno de los mejores partidos de la era Luis Enrique. Un encuentro que demuestra que es lo que quiere el seleccionador español para su equipo y como quiere que se comporten sus jugadores en el terreno de juego.