En la mira de los mejores

El Sudamericano sub-20 es una de las competiciones que más ha llamado la atención de los ojeadores europeos en el último tiempo y, esta edición del 2019 que se disputa en suelo chileno no es la excepción. La inmensa lista de jugadores de gran nivel que aparecen en cada una de las selecciones que participan en dicho evento, ha transformado en esta competencia, que también sirve para clasificar a la Copa del Mundo de Polonia, en una de las mejores del último tiempo, aún faltando jugadores de alto nivel como Vinicius Jr y Alejandro Marqués.

Dos de los nombres propios que están haciendo más ruido en el Viejo Continente, y a su vez son los líderes de la mejor selección en lo que va de la presente edición después de a primera fase, son Samuel Sosa y Jan Hurtado. Ambos venezolanos, y subcampeones del mundo de la categoría al haber formado parte de la plantilla de la selección venezolano que quedó subcampeona del Mundo en Corea del Sur hace dos años (donde también jugó el central de la Juventus Primavera Chrsitian Maoun), han ido creciendo a pasos agigantados desde su corta presencia en el balompié venezolano hasta el punto de ser referencias dentro de clubes de la división de honor de Argentina.

Aquí analizaremos brevemente tanto a Sosa como Hurtado, quienes han maravillado al mundo y que están generando que muchos equipos del Viejo Continente pongan sus ojos en ellos.

Samuel Sosa: el actual jugador de Talleres de Córdoba, es un volante ofensivo de muy buen regate y con mucho desequilibrio en cualquier sector de la cancha. Además de lo antes mencionado, cuenta con un sacrificio defensivo muy importante, sobre todo a nivel europeo, y una inteligencia para saber qué hacer cuando tiene la pelota en los pies. Aunque todavía erra en la toma de desiciones, cosas normales en jugadores de su edad, Sosa es maduro y muy inteligente. Pero, su principal virtud, como ya muchos se han dado cuenta, es su pegada de larga distancia y la pelota parada.

Jan Hurtado: el actual delantero de Gimnasia y Esgrima de La Plata es un ariete de corte inglés de antaño. Cuenta con un físico privilegiado, el que también usa muy bien a su conveniencia, y con una capacidad nata de desplazarse inteligentemente por el terreno de juego, donde la jugada le pide estar. No ha tenido suerte de cara al arco rival en este Sudamericano, pero Hurtado tiene una gran definición y una habilidad natural para desmarcarse en el área. Uno de sus problemas, y lo que más necesita potenciar en su futuro, es su falta de técnica a la hora de descargar o encontrar un compañero en ventajas y de cara al arco rival. Ese plus que le faltaría para dar verdaderamente el salto al Viejo Continente.

Pese a ser un equipo que se potencia desde el funcionamiento colectivo, la Vinotinto sub-2 depende abiertamente de las actuaciones tanto de Sosa como de Hurtado en la zona ofensiva. Si ellos están bien, el techo es muy alto para esta generación venezolana.