Regresa la polémica del estadio de la final de Copa del Rey

Barcelona y Sevilla se verán las caras nuevamente en la final de la Copa del Rey, reeditando la final disputada en el 2016 que conquistó el club azulgrana tras vencer por 2-0 en un encuentro disputado en el Vicente Calderón, y que tuvo como principal polémica, aparte de los pitos al himno nacional, la elección del estadio para la disputa de dicho partido, ya que el Madrid se negó en rotundo a ceder su estadio, a pesar de ser más grande, con tal de evitar que el Barcelona pudiera lograr un nuevo título en su estadio.

Para este año, la polémica ha revivido de nuevo, y con el Vicente Calderón ya en el pasado, todas las quinielas apuntan al Wanda Metropolitano como sede de la final. De hecho, muchos medios aseguraron que en la Federación ven con buenos ojos que la casa del Atlético de Madrid sea sede fija para las próximas temporadas, evitando así la polémica sobre la elección de un campo que satisfaga a los dos equipos participantes en dicho partido.

El Barcelona ve con buenos ojos la elección del Wanda, así como otras alternativas tipo Mestalla, mientras que el Sevilla quiere meter presión, y Pepe Castro, presidente del club hispalense, ya mostró su interés por disputar la final en tierras andaluzas, ya fuera en el Ramón Sánchez Pizjuán o bien en el Olímpico de Sevilla, aunque estas dos opciones parecen casi imposibles, con lo que catalanes y sevillanos deberán viajar hacia la capital para inaugurar el Wanda Metropolitano en lo que a finales de Copa se refiere.