Barcelona, no tocaba

Análisis y horizonte de la situación del Barcelona tras la eliminación contra el Chelsea

Una serie de catastróficas desdichas han supuesto que el Chelsea obtenga su billete para la final de Munich y el Barça se quede por primera vez en casi cuatro años lamiéndose las heridas que genera un KO en Liga y Champions League casi de forma consecutiva. ¿Fin de ciclo? No lo creo. ¿Punto de inflexión de consecuencias imprevisibles? Estoy casi convencido de ello.

Los tres goles del Chelsea han venido en los tiempos de prolongación, casi 50 disparos a puerta del Barça y tan solo dos goles anotados, diversos disparos a los palos, Peter Cech recuperando el casi vintage modo on-fire, lesión de Piqué que trastoca los planes de Guardiola, penaltis que se citan con el larguero negándole la gloria a un Messi sin la chispa necesaria, Cesc desaparecido y sembrando dudas a pasos agigantados sobre su rendimiento, Cuenca y Tello superados por momentos por la edad y la situación, Valdés que esta vez no salva, Xavi sin inspiración y quien sabe sin oxígeno, Alexis Sánchez voluntarioso pero sin gol, Didier Drogba con el modo “yo me lo guiso, yo me lo como” ON y alentado por lo que puede ser su última final continental. Y como no… Fernando Torres que acude siempre puntual a su cita con el gol en el Camp Nou –un clásico atemporal. Conclusión, el Chelsea alcanza su segunda final de la Champions League (tras la perdida en el Luzhniki de Moscú ante el Manchester United en mayo de 2008) y el Barça cae apeado con tanta dignidad y orgullo como desgracia y desdicha, mientras sus seguidores se preguntan como el fútbol puede llegar a ser un deporte tan maquiavélico y cabrón. Así es el fútbol. Esta es su grandeza y esta su miseria.

Muchas críticas desde Barcelona al planteamiento del Chelsea, las cuales no comparto en absoluto. Es innegable que el dispositivo que diseñó Roberto Di Matteo tanto en Londres como ayer en el Camp Nou ofrece una vistosidad cero para el espectador, pero a Di Matteo le pagan por obtener resultados, no por entretener al mundo. Es un profesional, no un bufón, y seguramente la única opción de lograr un hito histórico como es llegar a Munich apeando al vigente campeón continental era planteando el partido con un cerrojazo extremo. El Chelsea, de base, con once jugadores y con el balón en su poder juega a un ritmo lento y sin ideas, no es su fútbol, solo Mata conoce ese idioma. Ayer, en el Camp Nou, con un resultado favorable y con un jugador menos -miserable y punible acción de Terry- hizo lo que pudo, sobrevivir, que visto lo visto, no es poco.

El Barça fue mejor en Londres y el Barça fue mejor ayer. Disparó 47 veces, tuvo cuatro disparos a los palos en la eliminatoria y además falló un penalti. El Chelsea disparó cuatro veces a puerta en toda la eliminatoria y metió tres goles. Lo dijo Guardiola, sencillamente “NO TOCABA”. La vida no es justa, no le pidamos al fútbol que lo sea.

La suerte, el desacierto, las catastróficas desdichas y quien sabe si el destino jugaron un factor esencial en esta eliminatoria, pero como partes activas del juego que son, hay respetarlos, asumirlos y tenerlos siempre presentes. Los imponderables deben servir para argumentar, jamás para excusarse.

¿El Barça mereció pasar? Sin duda. ¿El Barça gestiona mal la segunda parte, se agobia por momentos y nota la presión a fallar? Parece evidente.

BIENVENIDO AL CLUB

Muchos iluminados apuntaban a que el “verdadero” Guardiola se vería cuando vinieran las vacas flacas. El Barça ha perdido los dos títulos más importantes de la temporada en tan solo 72 horas, y pese a ello, la rueda de prensa de ayer del técnico azulgrana fue impecable en el enésimo ejercicio de deportividad, mesura y sentido común del que aún se desconoce si será el entrenador del club a partir del 30 de junio. Esta semana debiera saberse algo en un sentido u otro.

-“Este año no tocaba” (lo repite hasta siete veces en rueda de prensa)

-“Felicito al Chelsea”

-“Espectacular reacción del público”

-“Con el 2-0 debíamos habernos parado y pensar, no lo hicimos y esa bola acabó en gol”

-“El 2-1 nos hizo daño psicológicamente”

-“Los rivales se adaptan y cada vez cuesta más”

-“En los próximos días me reuniré con Sandro (Rosell) y miraremos con calma que es lo mejor para la institución, porque en este momento ya toca”

- periodista: “Está triste tras lo de hoy?”

– Guardiola: “No sé ni lo que siento”

-“Los jugadores estaban hundidos”

- “Estamos aquí por él. Mi admiración hacía Messi es insuperable”

- periodista: "Qué le dirías a un niño que hoy ha llorado por primera vez con el Barça?" - Guardiola: "Bienvenido al club" (risas).

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