El 'Pirata' Granero toma el control del barco
Se ha convertido en el complemento perfecto de Xabi Alonso
La cantera es esa producción futbolística casera de la que tanto se presume en ciertas partes del país y parece que, ante tanto elogio, el resto de escuelas formadoras de jugadores quedan relegadas a un segundo plano y por lo tanto se ven privadas de valor, o al menos eso intentan vender.
Ahora bien. Es curioso ver como parece que tan solo salen jugadores buenos procedentes de la cantera del mismo sitio, parece que Barcelona tiene la patente de sacar y utilizar a jugadores. Sin embargo, como ocurre desde hace unas temporadas curiosamente en el bando históricamente contrario, Real Madrid, las oportunidades a jugadores procedentes de la cantera blanca son cada vez mayores.
Un dilema ha englobado la actualidad del conjunto madridista a lo largo de la semana. La importancia de Xabi Alonso en el centro del campo para Jose Mourinho le otorga galones de líder absoluto, de cerebro privilegiado para organizar el juego del Real Madrid, lo que se traduce en un cansancio evidente para el centrocampista vasco.
Ahora bien, parece que ha llegado la oportunidad de que Xabi Alonso descanse y el principal encargado a sustituirle en la tarea de la organización parece ser Esteban Granero. Un centrocampista que cuando ha disputado minutos junto al de Tolosa se ha convertido en el complemento perfecto para llevar a cabo el mejor juego de toque y colectivo de los blancos.
Uno de los últimos canteranos que se han asentado seriamente en la primera plantilla debe tomar ahora las riendas del proyecto ante la ausencia del maestro. Esteban Granero sonó el pasado verano como uno de los claros candidatos a abandonar el barco. Sin embargo, permaneció paciente, sin escuchar las voces que afirmaban que su papel íba a ser totalmente secundario, que Mourinho no contaba en absoluto con él.
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El 'Pirata' tendrá ante el Racing de Santander una oportunidad única de jugar ante el siempre respetable de Concha Espina como titular y con el mando del juego. La organización, su visión de juego y el toque que tanto se pregona como ejemplo del fútbol perfecto recae sobre la figura del centrocampista español.
Su papel es totalmente secundario, pero tras las pruebas de Lass, Khedira, Coentrao e incluso Pepe la figura de Granero es la que más ha gustado a la afición y Jose Mourinho ha presenciado cómo mejora el juego del Real Madrid cuando Granero está sobre el terreno de juego.
Quizás ahora su papel pase del segundo plano al director de orquesta, y deberá ser ahora cuando su nivel se evalúe en otros aspectos. Ya no será el complemento, el que cierra las segunda puertas, el que ayuda, sino será el encargado de intercalar la defensa con el ataque y hacer que el balón fluya sin excesivos problemas para los madridistas.