¿David Villa se quiere marchar del FC Barcelona?

"El Guaje" no se siente valorado en Barcelona y podría buscar destino.

Campeón del Mundo en 2010 siendo Bota de Plata y Balón de Bronce en el torneo; Campeón de Europa en 2008 siendo máximo goleador en la competición. Por si fuera poco, máximo goleador histórico de la Selección Española y mayor anotador español en Copas del Mundo. Si a este palmarés internacional le añadimos 161 goles en la máxima categoría del futbol español estamos hablando sin dudas de uno de los mejores delanteros europeos de la última década y posiblemente el mejor delantero español de la historia. Sin embargo, y por raro que parezca, en el club donde juega no está considerado como la estrella mundial que es, más bien se encuentra relegado a un insulso segundo plano que no hace justicia a la enorme calidad que atesora. Si aún no saben de quién estamos hablando, este futbolista es David Villa Sánchez.

Y es que Villa, allá donde ha jugado ha sido siempre la estrella del equipo y cuando no lo era se lo ha ganado a pulso, como cuando subió de la cantera del Sporting para convertirse en el jugador franquicia, al igual que hizo en Zaragoza cuando llegó y al Valencia. En todos ellos llegó como jugador que tenía que demostrar su calidad y al darle la oportunidad, David siempre la aprovechó y demostró todo lo que llevaba. Su fichaje por el Barcelona, en cambio, fue diferente. Llegó como el mejor delantero español de la historia, con el Mundial bajo el brazo y tras realizar unas temporadas espectaculares en el Valencia CF. Era ya, por tanto, un jugador contrastado cuya calidad estaba fuera de toda duda y no tenía que demostrar nada a nadie, al contrario que en sus anteriores etapas.

Sin embargo, y por raro que parezca, es en esta etapa como barcelonista cuando Villa ha encontrado más problemas para sentirse una pieza importante del conjunto dirigido por Pep Guardiola. Y eso que se ha amoldado sin mayor problema a todas las posiciones que su versatilidad le permite, jugando de extremo zurdo la mayoría de veces y en ocasiones de diestro. Las que menos, lo hace de delantero centro, su posición natural y preferida, pues ese lugar está reservado para el D10s de Pep, Lionel Messi y ningún delantero ha conseguido hacerle cambiar de idea. Cierto es que Messi se encarga partido a partido de refrendar el galardón de “mejor jugador del mundo” que se le atribuye, sin embargo esto conlleva una depreciación de cualquier otro jugador atacante que no sea el argentino, supeditando toda actuación a la de Leo. Y Villa, como otros antes, no está dispuesto a pasar por el aro.

Porque por esa situación ya pasaron estrellas como Ibrahimovic y Eto’o y ellos no quisieron tragar con esta situación de actor secundario e hicieron las maletas a las primeras de cambio. Una temporada duraron cada uno. El camerunés se marchó por una supuesta “falta de feeling” entre él y Guardiola pero el trasfondo es el mismo que no ocupa. Eto’o siempre había sido el delantero centro titular del FC Barcelona desde su llegada. Pero cuando Guardiola llegó y despidió a Ronaldinho, Deco y cualquier otro ego que pusiera en riesgo la supremacía de Messi, Eto’o claudicó pese a que lo querían fuera y aceptó su rol de secundario. No contento con eso, Guardiola se deshizo de él al segundo año y trajo a Zlatan Ibrahimovic. Otro futbolista estrella que fue relegado a un papel secundario por Guardiola, bajo el reinado de Messi. Y otro que no claudicó y se marchó al Milan tras una temporada, haciendo duras declaraciones contra “El filósofo” Guardiola siempre que puede.

Entonces fue el turno de Villa. David no tiene el mismo temperamento que el camerunés y el sueco y ya lleva dos temporadas en el Barça con Guardiola, cosa que los anteriores no pueden decir. Villa buscaba títulos y el Barça se los ha dado. Liga, Champions, Supercopa de España, Supercopa Europea… y una proyección mundial que no tenía en el Valencia. Pero en el plano personal, su orgullo de futbolista no está conforme con su situación. Villa quiere ser el protagonista, Villa quiere y merece atraer la atención de todos los focos en el terreno de juego porque lo ha demostrado, pero toda la atención recae sobre Messi. Sin embargo, David es una persona noble. Ni una mala palabra, ni un mal gesto, si hace falta claudicar ante Messi, el asturiano claudica, si su entrenador lo sitúa en una posición donde no se siente cómodo del todo, él acepta e intenta explotar al máximo sus cualidades en ese nuevo sitio… pero resulta evidente que a Villa le gustaría tener algo más. El cariño que la gente le mostraba en Valencia, Zaragoza, Gijón… no tiene nada que ver con el que le puedan mostrar la gente de Barcelona, quien sólo tiene ojos para el número 10. Y Villa pasa por el aro... la pregunta es, ¿hasta cuándo? De momento guarda silencio y nada muestra que no está conforme con su situación… su humildad y nobleza le honran. Sin embargo, David quiere ser rey, como ha sido siempre, no un soldado a las órdenes de otro… él lo merece.

Artículos destacados

Comentarios recientes