Crispación en el fútbol español
Frentes abiertos ante la vuelta de la competición
España vive en todos sus ámbitos tiempos revueltos, periodo de crisis en todos los aspectos. Todo es criticable, todo necesita mejorar, cualquier persona hace pública su opinión, todo son protestas. Evidentemente, privilegios de una democracia, de la libertad que en otros puntos del planeta tristemente no existen.
Sin embargo, en el aspecto futbolístico, en el punto de vista del fútbol la crispación existente hace que la normalidad, que la regularidad, que la calma esté muy lejos de adquirir su máximo esplendor.
Aficiones crispadas por la gran desigualdad existente entre Real Madrid, Barcelona y los dieciocho conjuntos restantes que conforman la Liga BBVA.
Clubes que, ante tal situación, se reúnen hoy en Sevilla para intentar cambiar una situación que preocupa y que ya incomoda en exceso a los perjudicados por las importantes diferencias salariales en lo que a derechos televisivos se refiere. Y lo más curioso, gracioso, lo de José María Del Nido, quien ahora denuncia la marginada situación que viven algunos clubes sin afirmar a nadie, porque no le conviene ahora decirlo, que ha renovado su contrato televisivo hasta el año 2015.
Jugadores molestos, cansados de la situación de impagos que se han vivido recientemente llevaron a la huelga en la Primera Jornada del Campeonato Nacional de Liga. Tras acuerdo entre LFP y AFE se reanudó la competición y todos, a primera vista, contentos.
Crispación, lejos de la tranquilidad por todos lados.
Los clubes, como instituciones, reclaman más dinero y ¿cómo lo intentan solucionar? Con las piezas básicas de todo el negocio, los aficionados, subiendo las cuotas de los abonos, cobrando más por lo que hasta hace unas temporadas valía menos, subiendo merchandising. En general, subida de precios en todos los sentidos.
Crispación también en los medios radiofónicos. Ahora resulta que deben pagar un canon por retransmitir los encuentros desde las cabinas de prensa desde los estadios. A priori, no habrá pago, pero la situación sigue empeorando con cruces de declaraciones. Las radios, todas juntas, son un grupo fuerte, capaces de poder lograr resultado alguno en una mesa de negociación, sin embargo, hasta que llegue un hipotético acuerdo que todavía se desconoce ¿quiénes son los perjudicados? Los aficionados, como no, que ven como son privados del servicio a la información y que, en servicios de alguna televisión de pago, les restan la sincronización de imagen y sonido de radio simplemente por el hecho de que al Señor Roures no le trataron como hubiera querido en una reciente entrevista.
Y ahora, lo más perjudicial. Nada concreto, nada seguro, pero una de las últimas situaciones con las que se especula es que quizás en futuras temporadas (descartada la actual por falta de previsión) se elimine por completo el encuentro en abierto considerado por el Gobierno de interés general. Una situación en la que se basan afirmando que el encuentro en abierto, gratis, tan solo se produce en España. Pues bien, de llevarse a cabo, la eliminación de un nuevo privilegio a los aficionados.
Crispación frente a intereses. Aficionados frente a instituciones de todo tipo.