Ziganda muestra su confianza con su actual plantilla

El Athletic de Bilbao vive uno de sus peores momentos en la última década. Los leones no terminan de enganchar dos partidos con buena sintonía, y pese a que venían de una victoria revitalizadora ante el Ostersund en Europa, se quedaron otra vez en el camino de hacerse fuertes en la Liga. La derrota ante el Celta de Vigo en Balaídos, encajando tres goles en apenas 30 minutos, le condena a una racha desastrosa: 4 puntos de los últimos 24 en juego, alejándolo desde bien pronto de los puestos que dan acceso a competiciones europeas para la próxima temporada.

Los leones llegarán al parón en el vagón trasero de la clasificación. Tendrán semana y media de reflexión para encontrar la fórmula de salir adelante. "Estamos siendo un equipo en San Mamés y otro fuera. Es un tema que tenemos que corregirlo. No puedo haber tanta diferencia entre uno y otro", destacó Ziganda. El balance es todavía más sangrante al observar que los otros siete puntos que tiene el Athletic en la clasificación se obtuvieron en las tres primeras jornadas, con victorias ante Eibar y Girona y un empate contra el Getafe. "No miro objetivos a largo plazo porque no son buenos. Ahora mismo miramos en el Villarreal", apuntó el entrenador.

La mala racha es una constante desde que el Athletic salió con buena cara del parón de septiembre. Los leones no estaban con daño en la Liga y en Europa, empezando a competir en julio, habían sacado dos previas ante Dínamo Bucarest y Panathinaikos. Pero a partir de ahí todo ha ido a peor. "Creo en este equipo", insistió Ziganda.